El Congreso insta al Gobierno a darle un incentivo fiscal al videojuego español

En el texto se reclama una línea de apoyo a la innovación en el sector del desarrollo de videojuegos dentro del CDTI (Centro para el Desarrollo Tecnológico e Industrial), continuar con el plan de comercialización, captación de inversiones y promoción internacional de la Industria española del Videojuego como Marca España a través del ICEX, y evaluar la extensión de incentivos fiscales a la producción de videojuegos . Esta última, una demanda que la industria y las desarrolladoras nacionales llevan realizando desde hace años.

«Llevamos muchos años trabajando para argumentar que el incentivo no es un gasto, sino una inversión. En los países en los que se ha introducido, como Francia y Reino Unido, llevan años publicando informes en los que se demuestra que cada euro o libra invertido en el incentivo se ha multiplicado. Es una medida que puede generar riqueza y un gran retorno de la inversión», destaca en conversación con ABC Emanuele Carisio, secretario técnico de DEV, la Asociación Española de Empresas Productoras y Desarrolladoras de Videojuegos y Software de Entretenimiento.

La PNL, efectivamente, insta al Gobierno a modificar el artículo 36 de la Ley de Impuestos sobre Sociedades para incluir el videojuego en la deducción por inversiones en producciones cinematográficas, series audiovisuales y espectáculos en vivo de artes escénicas y musicales. Desde DEV consideran que esta medida impulsaría la entrada de inversores nacionales e internacionales en los proyectos de videojuegos desarrollados en España. Según destacan, su eficacia ha sido «ampliamente demostrada en nuestro país en el sector audiovisual, incluida la animación y los efectos visuales, que ahora mismo se benefician de un porcentaje de deducción fiscal para sus producciones del 30%». El objetivo del sector es recibir las mismas ayudas que el resto de industrias culturales españolas.

«Varias de las medidas que recoge el texto, como el estudio de la extensión de incentivos fiscales a la producción de videojuegos, responden a una reivindicación histórica que de hacerse efectiva daría más liquidez a los estudios y al mismo tiempo atraería a proyectos internacionales generadores de riqueza y puestos de trabajo de calidad», explica, por su parte, José María Moreno, director general de la Asociación Española del Videojuego (AEVI), en un comunicado remitido a este periódico.

Desde las asociaciones destacan que, en estos momentos, el balón se encuentra en el campo del Ministerio de Hacienda , que es el que tiene la última palabra sobre la extensión de un incentivo a la industria. Cabe recordar que España es la novena potencia mundial en consumo de videojuegos. Durante 2020, este tipo de entretenimiento consiguió unos ingresos en nuestro país de 1.747 millones de euros ; bastante por encima del cine (169 millones) y la música grabada (354 millones). A falta de incentivos, el sector lleva años dependiendo de las subvenciones estatales y europeas para sacar proyectos adelante. Una forma de crecimiento que, según señalan, «no es sostenible».