Realme GT Master Edition: un 'smartphone' que demuestra que segundas partes nunca fueron buenas

Y ahora, apenas unos meses después, la firma lanza su nuevo Realme GT Master Edition , destinado esta vez a competir en la gama media, pero que comparte con el anterior algunas de sus prestaciones. El problema, sin embargo, tal y como ha podido comprobar ABC tras varios días de pruebas, está en las especificaciones que no comparte con el GT original .

Empezaremos, esta vez, por el final, es decir, por los precios. El terminal con 8GB de RAM y 128GB para almacenamiento cuesta 349 euros (el GT anterior salió a la venta por 449 euros), mientras que la versión de 12GB + 256GB sube hasta los 399 euros (el GT anterior costaba 599 euros). Poca diferencia, pues, si tenemos en cuenta lo diferentes que son las prestaciones de ambos teléfonos .

Y aunque es cierto que los precios del nuevo Master Edition pueden bajar aún más con las ofertas de lanzamiento (a 299 y 379 euros si se compran por Ali Express), y que los primeros 3.000 compradores se beneficiarán además de un bono adicional de 43 euros, las diferencias entre lo que son capaces de hacer los dos terminales siguen inclinando la balanza en favor del GT original.

Pero veamos. Como se dijo al principio, el nuevo Realme GT Master Edition comparte con el modelo anterior algunas características. En primer lugar, la pantalla, que sigue siendo una Super AMOLED de 6,43 pulgadas FullHD+ (1.080 x 2.400 píxeles) y con una tasa de refresco de 120 Hz, lo que garantiza la fluidez en juegos y vídeos con escenas de movimientos muy rápidos .

El diseño en general, incluída la disposición del módulo trasero de cámaras, también es el mismo. Aunque en uno de los colores, el gris, se ha incorporado una trasera especial, de plástico rugoso, diseñada (y firmada) por Naoto Fukusawa y que consta de una serie de bandas horizontales en relieve muy agradables a la vista y al tacto. Lo que confiere a este teléfono un aspecto original y diferente. Una lástima que lo mismo no se haya conservado en el resto de colores.

El Realme GT Master Edition también comparte con el anterior GT la triple cámara trasera , y el sistema de carga rápida de 65W, que permite cargar la batería de 0 a 100 en apenas 35 minutos. Aunque la batería, que en el GT original era de 4.500 miliamperios, se queda en 4.300 miliamperios en la nueva versión. En las pruebas realizadas por ABC, la duración de la batería, sin llegar a ser sobresaliente, fue correcta. En los escenarios de uso más exigentes (visualizando horas de vídeo y juegos) la batería resistió algo más de 9 horas, mientras que con un uso 'normal' el terminal aguantó, (aunque no superó) un día completo con una sola carga.

Como se ha dicho, en el apartado fotográfico el nuevo terminal hereda las cualidades (y las limitaciones) del modelo anterior . Tenemos, por lo tanto, una cámara principal de 64 megapíxeles y apertura de f/1.9; una cámara gran angular con sensor de 8 megapíxeles y apertura f/2.3; y una cámara macro de 2 megapíxeles y apertura f/2.4.

Una configuración que en el anterior GT, que aspiraba a la gama alta, se quedaba claramente corta y que en este GT Master Edition, que apunta a la gama media, parece más apropiada , aunque no está a la altura de las que se ofrecen otros modelos similares de la competencia. Y no es que haga malas fotos, especialmente si las condiciones de iluminación son buenas, pero la calidad decae de forma dramática en las escenas nocturnas o poco iluminadas, para las que es muy recomendable (casi obligatorio) activar el modo noche. Incluso el HDR, excepto en las escenas de contraluz, da como resultado fotos que a menudo son forzadas y poco realistas.

Sorprendentemente, sí que hay un aspecto en el que el Master Edition supera a su 'hermano mayor' : la cámara frontal, que ha crecido de los 16 a los 32 megapíxeles. La diferencia se nota, y mucho, en los selfies, más coloridos y brillantes prácticamente en cualquier condición de iluminación.

El procesador elegido para este terminal es el nuevo Qualcomm Snapdragon 778G , con tecnología de 6 nanómetros y con el que el fabricante de chips norteamericano pretende acortar las distancias entre la gama media y la gama alta. El GT Master Edition es el primer terminal del mundo que incorpora este procesador. En las pruebas realizadas (en la versión con 8 GB de memoria RAM), hay que admitir que el rendimiento fue más que correcto, aunque se queda muy lejos de la potencia del Snapdragon 888 del modelo anterior.

El teléfono, en efecto, puede de sobra con varias 'apps' a la vez (incluso con las más exigentes), y destaca el hecho de que, sea cual sea el esfuerzo al que se le someta, casi no se calienta . Solo en situaciones límite y poco realistas de uso (con varios juegos de los más exigentes abiertos a la vez) pudimos ver flojear al chip, aunque fue posible manejar todas las apps hasta el final.

Un punto claramente negativo, sin embargo, es el sonido . Realme, en efecto, ha decidido montar un solo altavoz en este terminal, por lo que se pierde el efecto estéreo del anterior modelo GT. El sonido nos llega plano y algo metálico, y con una calidad insuficiente para disfrutar de cualquier contenido multimedia. Resulta sorprendente que junto a una pantalla excelente y que permite ver series y películas sin problema la firma no haya apostado también por un sonido de mayor calidad.

La principal conclusión, pues, es clara: merece la pena gastar cien euros más y comprar el modelo GT anterior , mucho más potente y que seguirá siendo un gran teléfono incluso dentro de unos años.