lanzamiento
Huawei P8: más grande, más fino y con funciones exclusivas
El nuevo terminal representa el culmen del equilibrio perfecto entre arte, creatividad y funcionalidad, los valores heredados de la serie «P» de la compañía
Empieza el segundo asalto. Tras la espectacular presentación en Barcelona de los nuevos buques insignia de Samsung y HTC ( Galaxy S6 y One M9 ), quedaban por hablar algunos de los principales fabricantes de teléfonos móviles del mundo. Y ha sido la firma china Huawei , con su nuevo P8, la primera en mostrar su apuesta para la gama alta de este año. Durante las próximas semanas harán lo mismo LG, con su nuevo G4, y Sony, con su esperado Xperia Z4.
A diferencia de lo que suele suceder la mayoría de las veces, poco se sabía aún de las características del nuevo «smartphone» ultra fino de Huawei. Los rumores (y alguna imagen que otra) se habían limitado en esta ocasión a su aspecto externo, metal y cristal, muy de moda en la gama alta, y en la extraordinaria delgadez del nuevo terminal. Pero poco o nada se sabía de antemano sobre sus prestaciones, procesador, cámara o rendimiento. La firma china, esta vez, ha sabido mantener el secreto a buen recaudo.
Londres ha sido el escenario elegido para la puesta de largo del P8. Allí, en el Old Billings Gate, un antiguo mercado a orillas del Támesis, cientos periodistas especializados de todo el mundo se han acudido a ver el nuevo terminal de una de las compañías que más ha crecido durante los últimos años.
Richard Yu, consejero delegado de la división de consumo de Huawei, ha subido a escena para referirse al éxito de la serie P, que comenzó en 2012 con el P1 en Las Vegas y que, a partir de 2013, con el P6 y el P7 un año después, se convirtió en la saga de «smartphones» más glamourosos de la compañía. Ahora, el nuevo P8 recoge el testigo y será el encargado de mantener y ampliar el éxito de la firma en Europa.
Elegancia y diseño
Los cuatro pilares en los que se basa el nuevo dispositivo son cuatro: diseño, cámara, conectividad y usabilidad. Joonsuh Kim, director de diseño de Huawei, ha explicado cómo ha llegado a imaginar uno de los «smartphones» más elegantes y bellos del mercado.
Kim ha comparado con un iceberg el concepto del diseño. Vemos solo una pequeña parte y el resto, aunque está ahí, queda oculto a la vista. Construido en metal y cristal, se trata de un dispositivo sólido, completamente plano, con bordes plateados y esquinas ligeramente redondeadas. «Rectas y curvas alcanzan un perfecto equilibrio», ha destacado Kim. Una idea que ya podía verse en el anterior P7 y que ahora ha sido llevada hasta el extremo. El grosor del P8 es de apenas 6,4 milímetros, más fino, por ejemplo, que el iPhone 6 , que tiene 6,9 milímetros. La textura metálica está especialmente tratada para que refleje la luz de una forma especial.
La pantalla es de 5,2 pulgadas y cubre un espectacular 78,3 por ciento de todo el frontal, un ratio muy superior al de cualquier otro terminal (incluso el nuevo Samsuung Galaxy S6 es inferior, con un 77 por ciento), lo que permite que el «smartphone» no aumente su tamaño y pueda seguir usándose cómodamente con una sola mano. Llegará en color champán, gris, negro y oro.
La cámara ha sufrido una gran evolución con respecto a los modelos anteriores. Y, más allá de los megapíxeles, que tiene 13, está concebida para captar detalles que a la mayoría se le escapan. El macro, por ejemplo, puede enfocar a solo 4 cm. el objeto que estamos fotografiando.
El nuevo P8 cuenta con un estabilizador de imagen de última generación, con un grado «antimovimiento» de 1,2 (el del iPhone 6 es de 0'6). El zoom también ha sido mejorado y el sensor es capaz de mostrar colores hasta un 32 por ciento más brillantes y con un 78 por ciento menos de ruido, especialmente en ambientes con poca luz. El sistema de reconocimiento de rostros es prácticamente instantáneo, lo que hace posible captar sujetos con mucha más claridad y escenas lejanas con el foco adecuado.
A diferencia de sus competidores, Huawei ha conseguido que su cámara no sobresalga de la parte trasera del terminal, como sucede por ejemplo tanto con el iPhone 6 como con el Galaxy S6. Nada se dijo durante la presentación sobre la resolución de la pantalla, que aparentemente es Full Hd.
El software que acompaña a la cámara es capaz de conseguir efectos espectaculares como mostrar luces en movimiento (por ejemplo, rodeando a un sujeto), lo que permite obtener fotos imposibles, como una persona rodeada de un anillo de luz. En cuanto al vídeo, el «director mode» permite mostrar el mismo vídeo desde cuatro ángulos diferentes, conectando entre sí otros tres «smartphones» al que se dirige la acción. Una posibilidad que ya ha sido explotada por Sony en su Xperia Z3 y que permite mostrar la misma escena desde diferentes puntos de vista y en un único vídeo.
La conectividad, una de las especialidades de Huawei, ha sido mejorada hasta el punto de que el terminal reduce en un 50 por ciento el número de llamadas que se interrumpen y aumenta en un 20 por ciento la conexión, a la primera, de las llamadas que realizamos.
Nueva tecnología «Knuckle sense»
El sistema Wifi+, además, conecta automáticamente el terminal a la red lo más rápido posible, de forma que, de un modo transparente para el usuario, siempre podremos navegar a la máxima velocidad. El sistema Roaming +, por su parte, permite conectarnos a cualquier red de telefonía, cuando viajamos al extranjero, hasta tres veces más rápido que con cualquier otro terminal.
El nuevo P8 admite, además, dos tarjetas SIM 4G (nanosim) que pueden configurarse en pocos segundos. Huawei introduce también en este terminal una nueva tecnología, «Knuckle sense», que permite efectuar numerosas tareas (recortar una foto, seleccionar un texto, ampliar una imagen) con solo dar un ligero toque de nudillo sobre la pantalla.
El procesador es de fabricación propia. Se trata de un kirin 930/935 de ocho núcleos y cuyo rendimiento es hasta un 80 por ciento superior al de versiones anteriores. La batería, de 2.600 mAh, permite un día y medio de uso estándar y un día completo con un uso intensivo del terminal.
Un detalle curioso es su «marcador inteligente». Permite hacer llamadas desde el extranjero sin necesidad de introducir el prefijo del país. Muy cómodo para los que viajan mucho y deben ir a editar las entradas de la agenda si quieren llamar desde fuera.
Los micrófonos, por su parte, son capaces de reducir hasta en un 90 por ciento los ruidos de fondo, incluso si estamos utilizando cascos. Y también permiten oír con toda claridad a un sujeto a más de dos metros de distancia, por ejemplo, si ponemos el manos libres en una sala de conferencias. Aunque la persona que intervenga en la conversación esté en el otro extremo, el interlocutor al otro lado de la línea lo escuchará con toda claridad.
Otra función muy original es la de «despertar» al teléfono con la voz, algo muy útil en esas ocasiones en las que no sabemos donde hemos dejado el móvil. En lugar de buscarlo, podremos llamarlo diciendo simplemente «¿Donde estás?». El teléfono responderá «estoy aquí» y empezará a sonar para que lo localicemos de inmediato.
Un precio contenido
Entre los accesorios disponibles, destaca una funda de tinta digital, que muestra todos los datos del «smartphone» en una pantalla de 4,3 pulgadas de tinta electrónica y de muy bajo consumo, como los e-books. El nuevo P8 tiene 3 GB de RAM y cuesta 499 euros en su versión estándar, con 16 GB. El precio de la versión premium con 64 GB sube a 599 euros.
Pero hay más. El nuevo P8 tiene, como el iPhone, un hermano mayor con las mismas versiones: el P8 Max, con una pantalla de 6,8 pulgadas y una autonomía de más de dos días consecutivos. En este modelo, solo existe la versión Dual SIM, tanto de 16 GB como de 64 GB. El precio de los Max será de 549 y 649 euros.
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