Sovrano, así es el superyate más ancho del mundo

Con 169,16 metros de eslora y una manga de 33 metros, Sovrano –soberano en italiano– es, según indican desde la compañía, el yate más ancho del mundo. Aunque está pensado para un propietario privado, dadas sus características también podría servir como crucero para un grupo de millonarios que quiera viajar con absoluta privacidad. Los laterales pueden ampliarse de 22 a 33 metros para ofrecer más espacio a los invitados.

El diseñador italiano Pierpaolo Lazzarini ha pensado en todo con esta espectacular embarcación. En primer lugar, cuenta con dos helipuertos situados a ambos lados, plataformas que están diseñadas de forma que cuando no hay helicópteros a bordo se puedan convertir en piscinas o zonas de descanso. Cada plataforma está equipada con cuatro cabestrantes eléctricos que permiten bajar una sección hasta la línea de flotación para cenar junto al mar o tomar el sol junto al agua.

Dispone de cinco cubiertas que cuentan con centros de bienestar, gimnasios, jacuzzis y varias piscinas, entre otros lujos. Pero, sin duda, lo que más llama la atención es un oasis de paz y tranquilidad situado en la parte delantera, conocido como atrio, que cuenta con una piscina en el centro –que puede disfrutarse en cualquier época del año gracias a su cubierta– y que está rodeada de jardines y de un cómodo solárium. Esta embarcación tiene capacidad para unos 50 huéspedes repartidos en 20 lujosos camarotes y para una tripulación de 60 personas. Los interiores son totalmente personalizables a gusto del cliente, lo que la hace aún más exclusiva.

Dispone, también, de un garaje con capacidad para dos embarcaciones auxiliares de 15 metros de eslora, juguetes acuáticos y seis coches. Además, las embarcaciones se pueden lanzar directamente al agua desde el garaje gracias a una grúa.

Este yate, que ha sido diseñado para ser construido en acero y compuestos de fibra de carbono, podría estar propulsado con motores eléctricos o con un sistema híbrido para alcanzar una velocidad máxima estimada de 18 o 31 nudos , respectivamente. Para llevarlo a cabo serían necesarios unos 500 millones de euros y cuatro años de trabajo. Ahora habrá que esperar a ver si algún multimillonario se enamora de este concepto para comenzar su construcción.