Los hombres más elegantes llevan americana cruzada

Es cierto que primero cautivó a los diseñadores, que fueron quienes apostaron por recuperarla. No solo como parte del traje contemporáneo, sino como prenda versátil que puede vivir de forma autónoma en el vestidor del hombre, sin necesidad de acompañar a un pantalón a juego. Kim Jones para Dior Men (con un solo botón en su interpretación de la americana cruzada) abrió la puerta a una chaqueta que hasta la fecha era coto privado de las sastrerías clásicas. No dudaron en pasar y unirse a la fiesta firmas como Celine, Fendi, Gucci, Off-White o Prada , entre muchas otras.

Era 2019 y la americana cruzada ya era macrotendencia en la pasarela. La pandemia, lejos de lo que a priori pudiera parecer, no afectó especialmente a la escalada de popularidad de la prenda en cuestión, a buen seguro por el hecho de que no tardaron iconos de la moda como David Beckham en prolongar el uso de la blazer de doble botonadura más allá de la pasarela.

Era cuestión de tiempo esta versión de doble botonadura de la icónica chaqueta militar que llevó la tripulación de la Royal Navy británica a bordo del HMS Blazer -de ahí su nombre- para recibir a la reina Victoria por orden de su comandante, allá por 1837, llegara a la calle. Y así fue, en lo que llevamos de década no hay prenda con mayor protagonismo dentro de la sastrería masculina que la americana cruzada.

Es lógico teniendo en cuenta este clima en favor de su uso entre las celebrities más elegantes y ese reencuentro a nivel social de muchos hombres con el traje, al que habían dado de lado durante casi toda la década pasada.

En la actualidad, más allá del traje oversize, que es la otra gran tendencia dentro del universo de la sastrería , es la blazer cruzada una prenda que no falta en el armario de los hombres más elegantes con armario actualizado. Prenda por excelencia del Hollywood clásico de mitad del siglo XX, podemos afirmar sin miedo a equivocarnos que no había vivido un momento de tanto protagonismo en el vestidor masculina desde los años 70, cuando grandes iconos del cine de Hollywood la llevaban a menudo.

No hace falta que quieras parecerte a Humprhy8 Bogart en ‘El halcón maltés’ (1941), ni tampoco tienes que imitar a Al Pacino en ‘Scarface’ (1984), donde la luce en color blanco. Seguramente los mejores ejemplos, por antagónicos y populares, de cómo se llevaba una americana cruzada en el pasado, durante sus momentos álgidos en cuestión de estilo. En medio hay una enorme zona gris donde te puedes mover con soltura de la mano de una blazer cruzada clásica , azul marino o gris.

No dudes en darle libertad y en ser creativo: como decíamos antes, ya no tiene que ser parte de un look completo de sastrería. Sin ir más lejos, te la puedes poner hasta con unos vaqueros, unos botines chelsea y un jersey de cuello vuelto debajo, en clave casual.

Eso sí, a diferencia de la americana recta, con la de doble botonadura no puedes ser flexible con el corte y el volumen de la chaqueta : para que siente bien, nada de oversized. Hombros bien ajustados, siempre abrochada si estás de pie y que la americana cuelgue lo suficiente para que luzca su corte.

Sí puedes jugar algo más con los detalles del diseño; especialmente, con la botonadura, ya que las hay de 6 botones en dos hileras, de cuatro botones en dos hileras e, incluso, versiones contemporáneas con un solo fila de botones . Estas últimas son las más desenfadadas: de hecho, cuantos más botones, más formal.