Cinco formas de eliminar las bolsas de los ojos

Las bolsas en los ojos se producen por una acumulación de líquido y grasa en el párpado inferior. Toda la piel del contorno del ojo es mucho más fina que la del resto del rostro, y esto favorece las inflamaciones. La genética juega un papel fundamental, si tus padres tienen bolsas, probablemente tú las tendrás, y contra eso es complicado luchar. Pero, como explican los expertos del Instituto de Benito, también hay factores externos que las acentúan y que sí se pueden controlar. «Los malos hábitos como el tabaco, el alcohol, la mala calidad del sueño, falta de hidratación, el estrés y estar muchas horas en el ordenador contribuyen a que aparezcan de forma más precoz e intensa. También un factor desencadenante, además de la genética, son las variaciones de peso y volumen importantes en la cara».

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Araceli Nicolás

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Otro factor que también provoca la aparición de las bolsas de los ojos es la edad. La doctora Gema Pérez Sevilla, cirujana y experta en medicina estética facial, señala que «con el paso de los años, los tejidos que se encuentran alrededor de los ojos se debilitan, la piel pierde firmeza y se vuelve más flácida. De hecho, cuando los tejidos internos, la piel y el septum se van relajando, la grasa periorbitaria se proyecta en la parte del párpado inferior y, por ello, aparece el aspecto de bolsa».

Para eliminarlas hay diversas cosas que puedes hacer.

Si las bolsas de tus ojos se deben a la hinchazón temporal o por retención de líquidos, podrás mejorarlas simplemente modificando tus hábitos de vida. Duerme entre 7 y 8 horas al día, con la cabeza elevada, ya que esta posición ayuda a evitar la retención de líquidos. Limita el alcohol, el tabaco y la sal, así como todos los alimentos muy condimentados, que favorecen también la retención de líquidos.

Aunque no te lo creas la piel empieza a envejecer a partir de los 25 años, y esto incluye la que rodea a los ojos, mucho más sensible y delicada. Por eso es aconsejable aplicar un producto específico para esta zona y hacerlo desde una edad temprana para retrasar lo máximo posible tanto las bolsas de los ojos, como las ojeras. Si tienes tendencia a levantarte con los ojos hinchados, elige un contorno de ojos con activos descongestivos y drenantes como la cafeína o la vitamina K. Algunos de estos productos tienen un aplicador metálico que ayuda también a realizar un masaje mejorando las bolsas. El contorno de ojos se debe usar mañana y noche, después de la limpieza del rostro.

Un truco casero que funciona para reducir la hinchazón y mejorar las bolsas (siempre que no sean fruto de la genética) es aplicar frío, ya que tiene efecto antiinflamatorio. Si vas a aplicarte un cubito de hielo, no lo pongas nunca directamente sobre la piel, porque podría producirte una quemadura. Envuélvelo en una toalla. También puedes meter una cuchara en el congelador y aplicarla después o más fácil, hazte con un antifaz de gel, y tenlo en la nevera o el congelador, listo para usar en cualquier momento que lo necesites.

Cuando las bolsas de los ojos se convierten en algo habitual no queda más remedio que acudir a un médico experto en medicina y cirugía estética para que pueda valorarlas y elegir el mejor tratamiento. En algunos casos se puede aplicar ácido hialurónico. La doctora Paloma Borregón, dermatóloga y experta en dermatología estética, recurre a MaiLi Precise para borrar las ojeras del rostro de sus pacientes con un protocolo específico. Por su particular densidad, es el único que ofrece solución para la zona periocular, descansa la mirada y disuelve las ojeras y las bolsas. Como ella explica, «el producto utilizado es fundamental y este resulta ideal por su concentración de ácido hialurónico de 15 mg por ml y por estar diseñado específicamente para alisar las líneas finas y combatir las ojeras con un efecto de larga duración». El producto debe inyectarse manualmente con cánula desde la zona de la mejilla por un médico especializado. El ácido hialurónico se va reabsorbiendo, así que habrá que volver a repetir el tratamiento pasado un tiempo.

Pero para despedirte de las ojeras para siempre, desde el Instituto de Benito, lo tienen claro: «solo existe un tratamiento, la blefaroplastia. Se realiza con anestesia local o sedación, y es un procedimiento poco invasivo que consigue eliminar las bolsas y alisar la piel sobrante. Puede hacerse también mediante incisión transconjuntival en pacientes jóvenes con bolsas de grasa y que no necesitan resección de piel. No deja cicatriz».

La doctora Pérez Sevilla es de la misma opinión y aconseja «el blefaroláser o blefaroplastia asistida por láser .Se trata de una técnica que elimina las bolsas del párpado inferior utilizando un láser de nueva generación, que combina la tecnología del CO2 incisional y fraccionado, con la radiofrecuencia más puntera. La resección de las bolsas de grasa se realiza por el interior de la conjuntiva sin dejar ningún tipo de cicatriz o marca en la piel. El globo ocular está protegido mediante una lente de titanio para que no se pueda dañar».