Vijay Kumar, del MIT: «La educación online es buena como la presencial, que puedas oler al profesor no significa que aprendas más»

Kumar participó hace unas semanas en nuestro país en la celebración del evento internacional 'Digital Universities Europe', que la Universidad Oberta de Cataluña (UOC) ha acogido este año. Kumar es un viejo conocido de la UOC ya que los asesoró en los inicios y es un fiel defensor de la enseñanza online. Quizás porque la entiende como un puente para el 'open learning', es decir, la educación abierta, para todos, precisamente el área en que está especializado en el MIT, donde también cofundó el Jameel World Education Lab.

Parece una definición simple pero no todo el mundo sabe responder a qué es el 'open learning'

La educación abierta es hacer que las oportunidades educativas estén ampliamente disponibles, sin trabas para que técnica y legalmente haya oportunidades de aprendizaje para todos. Cuando se habla de oportunidades de aprendizaje es importante tener en cuenta el hecho de que los alumnos son de todas las 'formas y tamaños'. Las personas tienen una preparación, motivaciones, aspiraciones y contextos diferentes. Tienen también diferente acceso a las infraestructuras y a los recursos.

La definición está bien, pero ¿cómo se pone en práctica? ¿Cómo se crean contenidos educativos que estén ampliamente disponibles?

Cuando lanzamos en el MIT el OpenCourseWare en el año 1999 tuvo mucho éxito. Por aquel entonces se tomó la decisión de poner el contenido de nuestros cursos en la web a disposición de todos de forma gratis con fines educativos. Pero claro, que el contenido esté disponible no significa que estés recibiendo una educación del MIT. En ese momento, se aclaró que para eso tenías que vivir la experiencia del campus, ya sabe, cara a cara. También nos dimos cuenta de que el hecho de que el contenido esté disponible de forma gratuita y abierta, de que incluso existan los MOOC [cursos en línea masivos y abiertos] no significaba que todo el mundo tuviera acceso, porque no todos tienen la preparación adecuada para hacerlo o entenderlo. Para aprovechar este tipo de ofertas, necesitas tener primero acceso a otras: lo que llamamos cursos de éxito.

¿Cursos de éxito?

Por poner un ejemplo: si soy un estudiante y voy a hacer un curso de ética, ¿qué necesito hacer para tener éxito con dicho curso? Otro de de escritura. Es lo que llamamos cursos de éxito, cosas que aumentarán la probabilidad de éxito cuando hagas el curso inicial. Se les puede llamar también cursos de acceso [cursos cero para asentar conceptos antes de empezar la universidad].

Pero entonces no parece posible que cualquiera obtenga un título del MIT aunque disponga de todo la información en la web. Por poner un ejemplo: un alumno español que tenga acceso a los contenidos del MIT, los lea, aprenda e incorpore, ¿puede ser un graduado del MIT?

Bueno, hay dos versiones posibles para responder a esa pregunta. La respuesta corta a si un alumno haciendo todos los cursos en línea puede obtener un título del MIT es que no, pero tenemos varios programas. Hay cursos del MIT en línea con los que se pueden obtener certificados. También contamos con un programa llamado MicroMasters. Es una secuencia de cinco cursos. Hay MicroMasters en finanzas, en gestión de la cadena de suministro, en muchas áreas profesionales. Puedes hacer esos cinco cursos, obtener certificados online, hacer los exámenes y ser admitido en el MIT durante un semestre. Para los grados no lo hemos hecho todavía, pero sí para los másteres.

Pero no es gratis…

Cualquiera puede hacer los cursos. Si el alumno quiere certificados, sí hay que pagar. Pero créame, el precio es significativamente bajo. Si se obtienen esos certificados las empresas contratan, grandes compañías como IBM o Walmart lo hacen, los hemos visto. Pero esto no ocurre solo con el MIT. Hay alrededor de 100 instituciones en todo el mundo donde se pueden obtener estos certificados en línea. Luego puedes hacer un semestre en algunas de esas instituciones y obtener el título. Parte de la educación abierta es precisamente contar con diferentes vías para aprender, diferentes maneras de obtener certificados.

Está promoviendo la educación online. ¿Realmente es mejor que la presencial?

Es igual de buena. Solía bromear con esto diciendo que el hecho de que puedas oler a tu profesor no significa que estés recibiendo una educación mejor. Aquí hay que ver cuál es el resultado que quieres obtener. Piense en la serie CSI. Cada episodio es un laboratorio porque lo que están haciendo son análisis, pruebas, estableciendo parámetros y observando. Pero cuando estás en un laboratorio con pipetas manipulando fluidos realmente no estás aprendiendo nada más. Y usted me puede decir: «Pero es que la experiencia táctil es importante». Si tienes esa facilidad, bien. Si no la tienes, también podrás aprender: si usas un fluido y lo haces interactuar con otro usando determinados parámetros obtendrás el resultado que buscas. El hecho de que estemos acostumbrados a determinada modalidad de aprendizaje no la hace mejor. Hay una dimensión más profunda en su pregunta, y es que hoy en día lo que se llama experiencia en el aula también ha cambiado e incluye muchas veces lo online.

¿Lo mejor es una combinación de ambas?

Depende de lo que quieras enseñar, pero sí.

Durante la pandemia los alumnos cuyos colegios cerraron más tiempo perdieron más rendimiento. La pérdida de lo presencial pasó factura...

Cierto. Hubo pérdidas en muchos países, también en Estados Unidos. Pero los niños que pudieron conectarse a internet tenían cierta continuidad. Por otro lado, sufrieron durante la pandemia porque se olvidó el aspecto social del aprendizaje. Durante la pandemia nos dimos cuenta de que mucha gente que decía que lo online no era bueno, que le preocupaba o le daba miedo, se terminó uniendo a quienes lo defendemos. Al mismo tiempo, nos dimos cuenta de que la enseñanza online era insuficiente o que la gente no sabía cómo ponerla en práctica. Y es que es importante pensar en cómo enseñas online. En línea, por ejemplo, no tienes clases de 40 minutos y hay gente dedicada a la ciencia del aprendizaje que te dice que ese tiempo dando clase no es bueno. Hacer sesiones cortas en línea también permite hacer pruebas rápidas. Si le enseño algo, puedo preguntarle: «¿Ha entendido esto? Mientras que en las aulas presenciales no hacemos eso. Esperamos al examen semestral o final y a veces ya es demasiado tarde.