¿Se olvidan alguna vez los perros de sus dueños? Un estudio resuelve una de las dudas más frecuentes

Los lazos entre un perro y su dueño son enormes, y por ello, la pregunta de si estos animales pueden llegar a olvidar a las personas con las que han compartido su vida es recurrente. Todo el mundo ha visto alguna vez en internet el clásico vídeo que muestra el emotivo rencuentro entre un perro y su dueño después de varios años, pero, ¿qué hay de cierto en todo ello?

La realidad es que los cerebros de los perros poseen la extraordinaria capacidad de almacenar experiencias visuales y auditivas, pero por encima de todo olfativas, de forma indefinida, según revela un estudio realizado por el neuroeconomistaGregory Berns de la Universidad Emory. A diferencia de los humanos, que contamos con la memoria episódica, que nos permite recordar momentos y lugares específicos de nuestras vidas, los perros recuerdan las cosas por asociación.

Según descubrió el reputado experto, existe un área del cerebro del perro conocida como núcleo caudado, que es activada por el olor de una persona familiar. Esto significa que el olor humano permanece almacenado en el cerebro de un perro, lo que hace que un perro pueda recordar a alguien sólo por su olor. «Cabe destacar que los perros tienen 300 millones de receptores olfativos dentro de la nariz, en comparación con sólo 6 millones en los humanos. Y la parte del cerebro de un perro dedicada a analizar los olores es, proporcionalmente hablando, 40 veces mayor que la nuestra«, explica Berns.

Cuando un perro recuerda a alguien, su reacción se basa en las asociaciones que ha establecido con esa persona. Si un antiguo dueño se cruza en su camino, el lenguaje corporal del perro revelará mucho sobre la relación previa, especialmente en relación con el olor de esa persona. Un perro puede reaccionar de manera efusiva y alegre si la asociación es positiva, o bien, puede mostrar signos de temor o evasión si la experiencia pasada fue negativa, como en el caso de las visitas al veterinario.

Los perros también tienen una asombrosa capacidad de reconocer rostros humanos. Pueden identificar a las personas visualmente y son sensibles a características físicas específicas, como género, forma del cuerpo e incluso barba. Esta habilidad les permite recordar a las personas incluso después de largos periodos de separación.

Además, diversos estudios han demostrado que los perros reconocen las voces individuales y son sensibles a los tonos de voz. Por lo tanto, mientras un perro pueda ver y oír, pero, sobre todo, oler, es muy probable que recuerde a su dueño, sin importar cuánto tiempo haya pasado desde la última vez que se vieron.