Un gran incendio provocado por un pirómano rodea por completo Verín

Por la noche el fuego ha quemado más de cien hectáreas, su peligrosidad radica en la proximidad con el núcleo de población, por la tarde el fuego entraba en una fábrica.

Esta noche varias personas han sido confinadas y otras evacuadas de sus hogares, aunque ya pueden regresar a sus casas. Desde esta mañana la evolución del incendio empieza a ser favorable pero su cercanía al pueblo aún preocupa, y no esta controlado.

Con el nivel 2 de alarma ya declarado, para su control fueron movilizados este miércoles 4 técnicos, 11 agentes, 23 brigadas, 11 motobombas, 2 palas, 1 unidad técnica de apoyo, 9 aviones y 11 helicópteros. La Unidad Militar de Emergencias (UME) se ha incorporado a las tareas para intentar controlar las llamas y también han prestado colaboración efectivos de Guardia Civil, Protección Civil y medios portugueses.

Los medios se concentran ahora en la labor de extinción de un flanco de «muy difícil acceso», tarea en la que contribuirán también los medios aéreos en cuanto sea posible. Según BRIF, se trata de un incendio de interfaz urbano-forestal.

Las altas temperaturas, de más de 40 grados en el municipio han provocado que el incendio se extienda con violencia.

El humo y las llamas obligaron a cortar gran parte de la tarde la N-525, en torno al kilómetro 165, y la A-52, en el 157, pero sobre las 21.00 reabrieron.

La Consejería de Medio Rural galega da por hecho que el fuego es intencionado con focos pegados a viviendas, fábricas y que busca hacer el mayor daño posible. José González, el consejero, explicó el modus operandi del pirómano: «Los primeros focos se encendieron cerca de las casas, por lo que todos los efectivos se trasladaron ahí para proteger a las personas de forma prioritaria. Cuando todos los medios de extinción estaban centrados en sofocar estas llamas, el pirómano se desplazó en coche e inició el resto de focos».

El consejero dejó de está forma clara la intencionalidad del incendio, cuya autoría aún es desconocida. También insistió en la colaboración ciudadana para atrapar a este tipo de delincuentes.

Desde el ayuntamiento, el alcalde de la localidad, Gerardo Seoane, ha querido agradecer y enviar apoyo a «todas y cada una de las personas, brigadas y fuerzas de seguridad que en estos momentos están trabajando para frenar esta catástrofe».

Otros fuegos que afectan a Galicia son el de la parroquia de Mourentán, en Arbo (Pontevedra) y el de Maceda (Orense).