Cuándo se va a conocer al nuevo Papa: fechas, elección del cónclave y anuncio en El Vaticano

La muerte de Jorge Mario Bergoglio, nacido en Buenos Aires en 1936, fue confirmada por el jefe del departamento de salud del Vaticano y anunciada por el cardenal Kevin Joseph Farrell, camarlengo del Vaticano, el cargo que tras la muerte de un Pontífice asume la autoridad en la sede vacante, quien se convierte en el administrador de facto del Vaticano.

Francisco, que salió del hospital el pasado 23 de marzo tras una larga hospitalización de 37 días por una grave neumonía, apareció en público por última vez este domingo 20 de abril en la plaza de San Pedro, para la tradicional bendición Urbi et orbi.

Tras su fallecimiento, el cuerpo del Papa Francisco, descendiente de inmigrantes italianos piamonteses, será trasladado a su capilla privada, vestido con una sotana blanca y ornamentos litúrgidos, y colocado en un ataúd de madera forrado en zinc.

Tras reformular él mismo las normas funerarias Papales en 2024, su cuerpo se exhibirá directamente dentro del ataúd en la Basílica de San Pedro para que el pueblo pueda rendirle homenaje, pero no será expuesto en un catafalco elevado ni trasladado para vistas privadas de jerarcas eclesiásticos. Se iniciará así el luto de nueve días conocido como novendial.

Se destruye ahí el Anillo del Pescador -un anillo grabado con un sello que porta la imagen de San Pedro y que porta el Papa como su sucesor- y se declara el periodo de Sede Vacante, en el cual el liderazgo eclesial queda en manos del Colegio de Cardenales, pero sin facultades para tomar decisiones trascendentales hasta que se elija al nuevo sucesor.

En marzo de 2013, tras la renuncia del Papa Benedicto XVI, los fieles católigos tardaron dos largas semanas en saber quién sería su próximo representante de Dios en la Tierra, cuando la multitud congregada en la Plaza de San Pedro del Vaticano vio una columna de humo blanco elevarse hacia el cielo desde el tejado de la Capilla Sixtina. Una humareda como resultado de las papeletas quemadas de la votación celebrada entre los miembros del Colegio Cardenalicio. Acto final que sella el proceso de selección papal que se remonta, presuntamente, a tiempos de Jesucristo. ¿Qué ocurrirá ahora?.

Una vez que todo el mundo ha sabido de la muerte del Papa se fija entonces la fecha de inicio del cónclave, normalmente entre 15 y 20 días tras la muerte del Papa -esto significa que, previsiblemente, podría iniciarse entre el 6 y el 11 de mayo - y todos los cardenales menores de 80 años son convocados a Roma para participar en la elección del nuevo pontífice. Hay actualmente 252 cardenales, pero solo 138 podrían participar por edad.

El día del inicio del cónclave, método que utiliza la Iglesia católica para seleccionar a su líder, los cardenales desplazados a Roma celebran una misa, Pro Eligendo Pontifice, previa a este sistema democrático y presidido por el cardenal decano, para pedir a Dios sabiduría y certeza para elegir al futuro líder católico.

Después, los cardenales acceden al interior de la Capilla Sixtina, donde votarán para elegir a un nuevo Papa. En un procedimiento cargado de simbolismos, los cardenales son encerrados bajo llave -de hecho, cónclave viene del latín cum clave, bajo llave- y nadie puede entrar ni salir durante las votaciones.

Se realizan dos votaciones por la mañana y dos por la tarde, y el voto es totalmente secreto. Los cardenales comen y descansan en la Casa de Santa Marta, una residencia adyacente a la Basílica de San Pedro, en el interior de la Ciudad del Vaticano. En cada ronda, los cardenales escriben el nombre de su candidato en una papeleta y deberá realizarse una nueva votación si ninguno recibe los dos tercios requeridos.

El debate dentro de la Iglesia se divide en dos corrientes principales: los progresistas, que buscan continuar con las reformas de Francisco, y los conservadores, que desean un regreso a la tradición más estricta.

La elección no tiene ningún tiempo máximo establecido de forma oficial, por lo que pueden pasar, incluso, meses hasta que los tres cardenales designados como registradores den a conocer quién será el nuevo Papa.

El noviembre de 1268 tuvo lugar el cónclave más largo de la historia, que se desarrolló durante dos años y diez meses. La falta de acuerdo entre los cardenales, los conflictos políticos y las presiones externas fueron las razones principales de la extensa sede vacante que finalizó con la elección del italiano Teobaldo Visconti, quien eligió el nombre de Gregorio X.

En los últimos años los cónclaves se han desarrollado en un tiempo menor debido al consenso entre los cardenales: Benedicto XVI fue elegido a la cuarta votación, mientras que Francisco fue designado tras cinco rondas de elección.