En el tablero parlamentario, ningún jugador quiere desvelar con anticipación su estrategia. Aunque hay pistas, claro. Pero hoy en el debate para la toma en consideración de la proposición socialista que tiene el objetivo, según su portavoz Patxi López, de «prohibir el proxenetismo en todas ... sus formas y avanzar en la abolición de la prostitución» (incluyendo sobre el papel la sanción a los clientes) Sumar y PP podrían dar la campanada. Ambos se han guardado sus fichas y han aplazado fijar posición, salvo porque a ambos les preceden sus pronunciamientos: Sumar tiene en sus filas a marcas partidarias de regular y no prohibir la prostitución; mientras el PP es abolicionista, aunque podría manifestar su rechazo al texto oponiéndose o con una abstención.
De hecho, desde el Grupo Popular no han querido desvelar a ABC qué harán hoy. Y es que los votos populares serían decisivos para que la propuesta siguiera su curso parlamentario si Sumar, tal y como adelantan algunas fuentes, se descuelga de un Gobierno del que forma parte en este asunto.
El Pleno del Congreso va a debatir hoy el texto registrado en el Congreso y tal y como acordó la Junta de Portavoces de la Cámara Baja. No ha habido cambios. Según las manifestaciones de López, «en España hay más de 40.000 mujeres que se encuentran en situación de prostitución» y «para los socialistas, esto es incompatible con un Estado democrático y de Derecho digno». Los socialistas están «decididos a eliminar esta forma de violencia contra las mujeres y que ya el Pacto de Estado contra la Violencia de Género incitaba a que se eliminara». «Con esta ley, lo que pretendemos -enunció López- es castigar el lucro de la prostitución y la tercería locativa, la cesión de inmuebles para ejercer la prostitución».
El PSOE reconoce en el texto «la condición de víctimas a todas las personas que están siendo explotadas sexualmente y prostituidas en situación de proxenetismo». «Esperamos que sea una ley aprobada por amplia mayoría de esta Cámara, porque persigue un objetivo que debiera de ser compartido por todos», arengó el portavoz vasco.
A la izquierda del PSOE, las formaciones siempre han mantenido un gran disenso enconado. IU comparte el espíritu de esta proposición de ley, pero no los Comunes que, debido a la influencia de los llamados sindicatos catalanes de prostitutas voluntarias, han llegado a votar en contra del resto del grupo parlamentario y han rechazado cualquier propuesta de este tipo que ha llegado al Congreso. Ocurrió en 2022 con un texto similar, que decayó por el adelanto electoral del 23 de julio.
Lo que sí comparte todo el grupo de Sumar es el enfado hacia el PSOE por haber presentado esta proposición de ley, que a su entender divide al feminismo en lugar de unirlo contra la derecha. ERC y Junts, sensibles a la citada 'realidad catalana', votarán previsiblemente en contra.
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete