Arellano Cedillo, uno de los mayores expertos en Derecho Canónico, encargado del Papa para resolver el conflicto de Torreciudad

Arellano Cedillo es uno de los juristas más prestigiosos del Derecho Canónico actual. Tiene 62 años y es de Olías del Rey (Toledo). Es un apasionado del Derecho, con experiencia académica en España, Italia y el Vaticano. En el Vaticano se le aprecia por trabajar con serenidad y por dar un toque de buen humor a negociaciones complejas. Ha sido profesor de Deontología y desde marzo de 2021 es Juez decano de la Rota. Además, es consultor del Dicasterio para el Clero, organismo al que deberá mantener informado sobre la situación en Torreciudad.

Aunque gran parte de su trayectoria como juez se refiere a procesos de nulidad matrimonial como decano de la Rota está familiarizado con diatribas legales entre diócesis «u otras personas eclesiásticas, físicas o jurídicas que no tienen un superior por debajo del Romano Pontífice», según recoge el reglamento de esta corte.

El decano de la Sacra Rota es un juez elegido por el Papa como «primus inter pares» de este tribunal. Le corresponden funciones representativas, de coordinación entre los jueces del tribunal y de enfoque en el planteamiento de las sentencias. La Rota también «provee a la unidad de la jurisprudencia», y se ocupa de los procesos de nulidad matrimonial y de nulidad de ordenación sacerdotal.

El Papa Francisco nombró arzobispo a Arellano el 2 de febrero de 2023, y el 25 de marzo el cardenal secretario de Estado Pietro Parolin lo ordenó obispo en la catedral de Toledo. Es sacerdote desde hace casi 37 años. Pertenece a la confraternidad de los Operarios del Reino de Cristo, que atiende seminarios y ayuda a futuros sacerdotes.

Ahora deberá buscar una solución al conflicto sobre el estatus jurídico y pastoral de Torreciudad. La figura de comisario pontificio plenipotenciario significa que tendrá plenos poderes para resolver la diatriba entre la diócesis de Barbastro-Monzón y la Prelatura del Opus Dei. En una de las pocas entrevistas que ha concedido, publicada en el portal de la Archidiócesis de Toledo, explica que como juez y sacerdote, parte de su tarea es ver que «detrás de cada una de las prácticas, de cada posición, de cada causa, hay personas que esperan justicia y misericordia».