Virólogos asturianos desarrollan un test para detectar las nuevas variantes en menos de una hora
Pese al gran avance que supone, desde el Ministerio de Sanidad aún no se han puesto en contacto con el laboratorio del Hospital Universitario Central de Asturias
El laboratorio donde se ha desarrollado la nueva técnica
En el laboratorio de virología del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) han conseguido acortar un proceso que normalmente duraría dos meses a un solo día. Al ver que las variantes de coronavirus cobraban cada vez más importancia, decidieron crear un nuevo sistema más ... fácil y eficiente para saber si una muestra era positiva en una de las tres variantes más comunes –la británica , brasileña y la sudafricana– en menos de una hora.
«Lo que hacemos es diseñar dos ondas en la posición 501, que es común a las tres variantes que están circulando, una que lleva la mutación 501 y otra que no. Las marcamos de forma diferente y con una PCR vemos cuál de las dos es positiva», explica a ABC Santiago Melón, jefe del laboratorio de Virología del HUCA. Y es que la ventaja que ofrece este sistema no es solo la rapidez: «Lo puedes hacer con más cantidad de muestras y estandarizarlo para todas las que sean positivas», como hacen en su laboratorio.
Con un sistema clásico que aporta más información como en una secuenciación masiva, el proceso puede tardar diez días y no se puede trabajar con tantas muestras positivas. «Al ritmo que vamos nosotros, con 150 pruebas positivas que comprobar cada día, tardaríamos dos meses en hacerlo con el método tradicional porque se comprueban entre diez o 15 muestras cada vez», asegura el virólogo. A principios de esta semana habían analizado ya casi 3.000 muestras con el nuevo sistema de discriminación de variables.
Miedo al desbordamiento
«La idea surgió porque somos muy inquietos y estamos todo el día pegándonos con estas cosas», reconoce Melón entre risas al otro lado del teléfono. «Cuando vimos que estaba aquí la variante inglesa, nosotros teníamos acceso a sistemas de secuenciación, pero no eran prácticos . Al trabajar con cuatro cepas, temíamos que nos desbordara. Llevábamos mucho tiempo intentando adaptarlos a un diagnóstico realmente clínico y que fuera rápido y eficaz. Entonces empezamos a ver qué podíamos hacer, cómo podíamos discriminar a esas variantes, y nos dimos cuenta de esa posición 501», detalla el responsable del departamento.
A pesar de ser un sistema pionero en España, fácil de implantar y que presenta claras ventajas para identificar si un positivo está infectado o no con una de las nuevas variantes del coronavirus, el Ministerio de Sanidad no se ha puesto en contacto con los responsables del laboratorio para trasladar su modelo a otros hospitales o laboratorios españoles.
Melón indica que lo «bueno e interesante» es secuenciar cada variante con el sistema clásico, ya que aporta más información, pero asegura que un sistema eficiente como el desarrollado en el HUCA puede ayudar a generar mayor evidencia científica sobre las cepas y a controlar la transmisión. «Podríamos estudiar si la vacuna falla o no, cómo es la respuesta serológica, si se relaciona o no con una mayor gravedad de la enfermedad. Todo lo que sea información nos va a ayudar a luchar contra esta enfermedad, está claro», declara.
De momento solo cuatro hospitales han implantado el nuevo sistema y en breve está previsto que lo hagan otros dos, según indica Melón. Además, el responsable señala que también se han interesado por el protocolo profesionales de Valencia y recuerda que «está disponible para quien lo necesite».