El PP contraataca al Gobierno y asegura que la LOE de Zapatero favoreció la proliferación de libros de texto

Pero sí es la primera vez que los socialistas se tienen que enfrentar a la polémica, y lo han hecho descargando en los populares las culpas sobre la proliferación de los libros de texto. Éstos se han rebelado ante las acusaciones de la ministra de Educación, Isabel Celaá, y han advertido que el origen del problema está en la Ley Orgánica de Educación (LOE), aprobada por el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero .

La denuncia de los editores desvelando que, por ejemplo, Cataluña presiona para que los libros no hablen de los Reyes Católicos , o que Andalucía pide que se incluya el tambor rociero como uno de los grandes instrumentos de la música, ha levantado ampollas en el Ejecutivo.

En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, la ministra de Educación afirmó que la proliferación de los libros de texto es «consecuencia de una derivada indeseable» de la Lomce, una ley que establecía «asignaturas troncales, de libre configuración y específica» y promovió la proliferación «de una manera desmesurada de libros de texto».

Antes de su ataque al PP , la ministra se había puesto en contacto con los editores y, en un intento de frenar la polémica, los ha citado a una reunión el próximo miércoles.

Desde el PP, la portavoz adjunta del Grupo Parlamentario, Sandra Moneo, negó a ABC las acusaciones del Gobierno y le respondió a la ministra que «ella sabe que el origen está en la LOE. Desde el momento que no incluye las enseñanzas comunes en sus propios términos dejó un margen amplio de interpretación de los currículos a las Comunidades autónomas». La diputada popular subraya que «la ministra hace una interpertación sesgada e interesada de la realidad».

La reacción del PP no fue la única. Ciudadanos , por su parte, registró ayer por la mañana una petición de comparecencia de la ministra Celaá en la Comisión de Educación y Formación Profesional de la Cámara Baja.

Igualmente, el sindicato CSIF responsabilizó a la «dejación de funcioones del Ministerio de Educación» como culpable de esta situación y a la LOE, al retirar la autoridad sancionadora de la Alta Inspección Educativa sobre los contenidos de los libros.