Las playas no son sólo de la costa

En el año 2010, Costadulce, en Orellana la Vieja (Badajoz) fue la primera playa de interior en recibir el distintivo de Bandera Azul. Esta insignia premia a aquellas costas que cumplan con las exigencias de calidad de la Asociación de Educación Ambiental y del Consumidor (ADEAC).

Como ésta, situada en el embalse de Orellana, se encuentran numerosos ejemplos por toda la geografía española. De sur a norte se puede hacer un repaso por algunas de las costas de agua dulce que sirve a mucha gente para dirimirse por no poder acudir a la playa en verano.

En Andalucía, por ejemplo, hay tres claros ejemplos de estas costas interiores. La provincia de Sevilla cuenta con La Playa de San Nicolás del Puerto que es una alternativa fluvial a las grandes costas andaluzas. Las aguas frías del río Galindón son la perfecta escapatoria para el calor veraniego.

Cádiz , conocida por sus lugares de costa, como el Puerto de Santa María, San Fernando, o Rota, también cuenta con el lugar perfecto para aquellos que busquen huir del bullicio veraniego. Se trata de un enclave situado en la zona de los pueblos blancos, en la sierra de Grazalema. La«Playita» como es conocida está situada en la localidad de Zahara de la Sierra.

Córdoba , una de esas provincias de interior andaluza donde el calor veraniego es tan famoso como sus monumentos, cuenta con su propia playa situada en el pantano de Valdearenas , en Iznájar. Este enclave es un lugar perfecto, además, para la práctica de deportes náuticos o de la acampada libre.

Pero no sólo los andaluces disfrutan de estos enclaves. Un poco más al norte, entre las provincias de Albacete y Ciudad Real , se encuentra el Parque Natural de las Lagunas de Ruidera . Un gran paraje paisajístico que además de su belleza ofrece numerosos lugares de baño: Laguna del Rey, Laguna Colgada, Laguna Salvadora... Una gran oferta de playa y de actividades náuticas.

La Comunidad de Madrid también ofrece uno de estos lugares. En el Pantano de San Juan se encuentra la Playa del Muro, en la localidad de Pelayos de San Juan; se encuentra la tan anhelada playa madrileña. Un enclave situado en las primeras estribaciones de la Sierra de Gredos ofrece la oportunidad a los madrileños de disfrutar del agua y sus actividades. Sin duda, la playa de Madrid.

Ya en Castilla y León nos encontramos con la playa fluvial de Cimanes del Téjar , un paraje situado en un vergel que sin duda cumple las veces de playa para los bañistas locales. Situado a sólo 26 km. de la capital provincial, sirve también de playa para la propia ciudad de León .

La última parada de este recorrido nos lleva a la provincia de Álava . Vitoria tiene a tan sólo 17 kilómetros la Playa de Landa . Situada en la localidad homónima, es muy visitada por los habitantes de la capital de la provincia al permitirles la posibilidad de disfrutar de una playa en un magnífico paisaje como es el del embalse de Ullibari-Gamboa.

Sin embargo, la geografía española es tan rica que permite hasta la opción de disfrutar de playas de interior de agua salada. Se trata de la playa de Gulpiyuri en Asturias . En la la localidad de Naves, concejo de Llanes, se encuentra este enclave paisajístico espectacular. Se trata de una pequeña cala retrasada del borde costero. Es algo difícil de encontrar y eso es también parte de su encanto.

En definitiva, estos son sólo nueve de las muchas playas de interior que nos encontramos en España. Una «dulce» alternativa a los típicos veraneos de costa, e igualmente eficaces para combatir las temperaturas estivales.