La educación concertada ve «discriminatorio» que no se creen plazas subvencionadas de guardería en sus centros

La medida, según explicó este martes la ministra de Educación, Pilar Alegría, durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministro, permitirá la conciliación laboral, familiar y personal. Sin embargo, las asociaciones profamilia y los demógrafos consultados por ABC coinciden en que la medida es «insuficiente». La patronal de la educación concertada subraya además que es «discriminatoria», ya que en lugar de garantizar la gratuidad de la enseñanza de 0 a 3 años solo se crearán plazas en centros de titularidad pública.

El secretario general de Escuelas Católicas, Luis Centeno, explicó que con esta medida el Gobierno demuestra una vez más que «la ideología está por encima de lo que debería ser el sentido común y lo que desean las familias». «Al final lo que buscan los padres es que la educación sea gratuita y que ellos puedan elegir el tipo de centro que quieren para sus hijos», afirmó. Actualmente, la mayoría de la educación de 0 a 3 años es de titularidad pública o privada, «hay muy pocos conciertos», precisó Centeno, quien recordó que el 25% de los alumnos de enseñanza obligatoria estudian en un centro concertado, por lo que el Gobierno debería respetar que el 25% de esas nuevas plazas de guardería se subvencionaran en centros concertados para poder garantizar la libertad de elección de los padres.

Para el presidente de la Federación Española de Familias Numerosas, José Manuel Trigo, es «prioritario un plan de conciliación real, factible y no utópico» y eso «no se consigue con una sola medida». En la misma línea, la secretaria académica del Instituto CEU de Estudios de la Familia, Carmen Sánchez Maillo, considera que para evitar que la medida del Gobierno se quede en «un anuncio electoralista» es necesario «tomarse en serio las políticas en favor de la familia». Entre esas iniciativas, Maillo, citó «la prestación por hijo a cargo, alivio fiscal, subvenciones a las empresas para contratar a madres con hijos pequeños, flexibilidad horaria, etc.».

Aunque siempre es una buena noticia la inversión pública en educación, el coordinador del Observatorio Demográfico de la Universidad CEU San Pablo, Alejandro Macarrón, alertó de que con «parches» no se consigue solucionar un problema de fondo como es el de la baja natalidad. «Las medidas parciales o para cubrir el expediente son peligrosas porque corremos el peligro de que nos anestecien sobre la percepción del problema real». Según recordó, en España deberían nacer cerca de 600.000 niños cada año -y no solo los 339.000 nacimientos que se produjerone en 2020- para poder garantizar el relevo generacional.