Andalucía, Canarias y el País Vasco se oponen al copago farmacéutico

En Andalucía, la consejera de Sanidad en funciones, María Jesús Montero , ha manifestado su «rechazo frontal» a la propuesta impulsada por la ministra de Sanidad, Ana Mato. «Pasa la factura de la crisis a los pensionistas y a los trabajadores con nómina, es decir, a aquellas rentas del trabajo que tienen más dificultad para llegar a fin de mes. De facto significa la reducción de las pensiones y un nuevo impuesto a las rentas del trabajo», criticó.

Montero aseguró que el ahorro será mucho menor a lo previsto por el Ejecutivo y que no superará l os mil millones de euros .

En el País Vasco, el consejero de Sanidad, Rafael Bengoa , también criticó la medida y dijo que «hay muchas otras formas de hacer sostenible el sistema». Indicó que «hay alternativas dentro y fuera, un país en crisis tiene que gastar menos en Defensa y no entrarle al trapo a los temas de salud y educación».

Dijo que había que apostar por la racionalización. Señaló que « el 30% de los pacientes que reciben el alta hospitalaria vuelven a ingresar 30 días después». Indicó que esto podría evitarse con un mejor seguimiento de los dados de alta. Además propone racionalizar las pruebas diagnósticas, pues el 15% de las mismas se repiten en la atención primaria y en la hospitalaria.

La consejera de Sanidad del Gobierno Canario, Brígida Mendoza , también se ha mostrado en contra del copago sanitario pues considera que se trata de una medida «que altera la equidad» y que «penaliza al enfermo».

El consejero de Salud de Castilla-La Mancha, José Ignacio Echániz , ha valorado positivamente la medida anunciada por el Gobierno central sobre el pago farmacéutico y que hará que los pensionistas tengan que pagar el 10 por ciento del coste de sus medicinas. Indicó que del mismo modo que «los pensionistas tienen que pagar su comida, su ropa o sus elementos cotidianos, parece razonable que las medicinas, que es elemento esencial de la salud, tengan una pequeña contribución»

El consejero de Sanidad de Aragón, Ricardo Oliván , también defendió el copago farmacéutico en función de la renta pues dijo que no es una medida de carácter recaudatorio, sino disuasorio. «Yo lo entiendo más como una medida no tanto recaudatoria, sino que pretende ir en la línea del uso racional del medicamento».