Los cirujanos se sienten engañados por las prótesis PIP

En marzo de 2010 las autoridades francesas detectaron que las prótesis PIP estaban fabricadas con un gel de silicona diferente del declarado, que ponía en duda sus garantías, momento en el que la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios ordenó el cese de la colocación de esos implantes, en concreto el día 31 de ese mismo mes. Tejerina, jefe de Servicio de Cirugía Plástica y Reparadora del Hospital Clínico de Valencia, ha señalado que se calcula en «varios miles» las pacientes a las que se ha implantado estas prótesis, que se han roto en cerca del diez por ciento de ellas.

El experto ha recordado que el Ministerio de Sanidad ha señalado que no hay «vinculación directa» de las prótesis mamarias PIP con tumores, el desarrollo de cáncer de mama o una «toxicidad alarmante», aunque sí se rompen antes y producen alteraciones inflamatorias.

El también vicepresidente de la Sociedad Española de Cirugía Plástica, Reparadora y Estética (SECPRE) ha señalado a Efe que se recomienda a las pacientes que estén en contacto directo con su cirujano para que les haga un seguimiento y, ante la sospecha de rotura, cambie la prótesis.

«Si la paciente tiene una alteración importante por llevar la prótesis dentro, de acuerdo con el cirujano debe también cambiársela», ha agregado. A su juicio, debe haber una alarma «controlada» y, aunque ha señalado que las prótesis mamarias PIP han tenido «irregularidades» en su fabric ación, se debe hacer caso a las autoridades sanitarias.