China administra vacunas experimentales contra el coronavirus a grupos de alto riesgo desde julio

El objetivo del gigante asiático es aumentar la inmunidad de grupos específicos de personas, incluidos los trabajadores médicos y los que trabajan en los mercados de alimentos, transporte y servicios, según explicó Zheng Zhongwei, el funcionario de la Comisión Nacional de Salud, a la televisión estatal en una entrevista transmitida el sábado por la noche.

Las autoridades, además, podrían considerar expandir el programa de uso de emergencia de dicha vacuna para tratar de prevenir posibles brotes durante el otoño y el invierno, según Zheng, quien encabeza el equipo liderado por el gobierno chino que coordina los recursos estatales para el desarrollo de la vacuna contra el coronavirus.

Cabe recordar que las pautas de emergencia para el uso de posibles vacunas contra el coronavirus, aprobadas el 24 de junio según Zheng, no se han hecho públicas.

El medio estatal «Global Times» informó en junio que China había estado ofreciendo vacunas candidatas contra el coronavirus a empleados de empresas estatales que viajaban al extranjero.

El precio de este tipo de vacunas, dijo Zheng, será cercano a lo que cuesta crearlas. «No significa que las empresas no puedan obtener beneficios», aclaró, pero «las empresas deberían decidir entre ganancias moderadas o razonables basadas en los costes».

Una posible vacuna contra el coronavirus que está desarrollando una unidad del Grupo Farmacéutico Nacional de China ( Sinopharm ) no podría costar más de 1.000 yuanes (122 euros) por dos inyecciones, dijo el presidente de Sinopharm, Liu Jingzhen, a los medios estatales la semana pasada.