Al menos 2.000 muertos en Libia por la tormenta Daniel

Las autoridades locales confirmaron que dos presas han colapsado debido a las tormentas, liberando más de 33 millones de metros cúbicos de agua y causando inundaciones devastadoras en la ciudad, según 'The Libya Observer'. Los cuatro grandes puertos del país están cerrados al tráfico marítimo.

La división que se registra en Libia desde la caída en 2011 del régimen de Gadafi también se manifestaba ayer en las valoraciones de los dos gobiernos que pugnan por el control del país con mayores reservas de petróleo de África. Así, mientras el portavoz del Ejecutivo 'rebelde' con sede en Bengasi hablaba de 150 víctimas en la zona de Derna, por su parte el jefe del Ejecutivo de Trípoli -internacionalmente reconocido-, Osama Hamad, elevaba la cifra a dos mil.

A su vez, un portavoz del Ejército Nacional Libio, leal a Bengasi, aseguró que el número de desaparecidos alcanza los 6.000. Desde hace año y medio, dos gobiernos compiten por el poder: el de Abdelhamid Dbeibah en Trípoli, reconocido por Naciones Unidas, y el designado por el Parlamento y apoyado por el hombre fuerte de Bengasi, Khalifa Haftar.

Ninguna de estas cifras ha sido ratificada por organizaciones internacionales u observadores independientes.

Imágenes captadas por residentes de ciudades del este como Derna y Al Baida muestran enormes deslizamientos de tierra y barrios enteros bajo el agua, así como carreteras y edificios derrumbados.Un funcionario de la alcaldía de Derna citado por Afp calificó la situación en su localidad de «catastrófica», «fuera de control» y que requiere «una intervención nacional e internacional». De momento, Qatar, Argelia, Túnez y Egipto han anunciado el envío de ayuda humanitaria con carácter urgente.

La coordinadora de la Misión de Apoyo de la ONU en el país norteafricano, Georgette Gagnon, ha encargado la asistencia del Equipo de Respuesta de Emergencia para apoyar a las autoridades del este de Libia. «Los informes iniciales indican que decenas de ciudades y pueblos resultaron gravemente dañados por las tormentas y las graves inundaciones, incluidas pérdidas de vidas y daños a infraestructuras y propiedades», aseguró Gagnon.

La previsión ahora es que la tormenta Daniel se desplace hacia el este, rumbo a Egipto.

El este del país alberga los principales campos y terminales petroleros, y el temporal ha obligado a la Compañía Nacional del Petróleo (NOC) a declarar el «estado de alerta máxima» y suspender los vuelos entre los centros de producción donde se disminuyó la actividad drásticamente.

Equipos de rescate fueron enviados el domingo a Derna, una ciudad de más de 100.000 habitantes (a 900 kilómetros al este de Trípoli) atravesada por un río que desemboca en el Mediterráneo.

Cientos de habitantes siguen varados allí, en zonas de difícil acceso, mientras los equipos de rescate, respaldados por el Ejército, intentan acudir en su ayuda.

Imágenes tomadas por residentes de ciudades del este como Derna, Al-Bayda y pueblos más pequeños muestran enormes deslizamientos de tierra y barrios enteros bajo el agua, así como carreteras y edificios derrumbados.

Con las reservas de petróleo más abundantes de África, Libia está sumida en el caos desde la caída del régimen de Muamar Gadafi en 2011 y sacudida por divisiones y violencia.

Desde hace un año y medio, dos Gobiernos compiten por el poder: el de Abdelhamid Dbeibah en el oeste, reconocido por la ONU, y el designado por el Parlamento y apoyado por el hombre fuerte del este, Khalifa Haftar.

Durante un Consejo Extraordinario de Ministros retransmitido en directo por televisión este lunes, Dbeibah ha anunciado «tres días de luto nacional».

La misión de la ONU en Libia ha afirmado que estaba «siguiendo de cerca la situación» y ha expresado su «solidaridad con las familias de las víctimas».