La DGT multará este verano a quienes tengan esto en el retrovisor de su coche

Aunque pueda parecer inofensivo, llevar cualquier elemento colgado del retrovisor puede convertirse en un problema serio. De hecho, la DGT ya ha advertido de que este verano no pasará por alto esta práctica, por lo que muchos conductores podrían enfrentarse a diferentes multas sin ser del todo conscientes de ello.

El motivo principal es sencillo, todo lo que obstruya el campo de visión del conductor incrementa el riesgo de accidente. Aunque un ambientador parezca pequeño e inofensivo, puede bloquear parte de la vista de la carretera, sobre todo en maniobras como giros, adelantamientos o cambios de carril. Además, si no está bien sujeto, podría soltarse y distraer al conductor en el peor momento.

La normativa de tráfico es clara al respecto: el Reglamento General de Circulación prohíbe expresamente cualquier accesorio o elemento que limite la visibilidad o suponga un peligro potencial. Y los agentes de la Guardia Civil de Tráfico o la Policía Nacional pueden multar a quien infrinja esta norma.

Las sanciones no son precisamente simbólicas. Si un agente considera que el ambientador o cualquier objeto colgado del retrovisor obstaculiza la visión del conductor, la multa puede llegar a los 200 euros. Sin embargo, la situación puede agravarse si el objeto se desprende y sale despedido fuera del vehículo, algo que podría suponer una sanción de hasta 500 euros y la retirada de hasta cuatro puntos del carnet de conducir.

Aunque el caso más habitual es el del ambientador clásico colgado del espejo, no es el único objeto que puede convertirse en motivo de sanción. Muchos conductores colocan banderines, cintas religiosas, crucifijos o incluso adornos personales. Todos estos elementos también están en el punto de mira de la DGT.

Incluso los soportes para móviles que se adhieren al parabrisas pueden resultar problemáticos si dificultan la visión de la carretera. En este sentido, Tráfico recomienda optar por alternativas más seguras, como los imanes que se fijan al salpicadero y mantienen el teléfono en una posición adecuada sin interferir en el campo de visión.

Así que para evitar este tipo de sanciones basta con mantener despejado el parabrisas y el retrovisor de cualquier objeto colgante. Recuerda que la visibilidad debe ser siempre total, especialmente en trayectos largos. Por eso, antes de arrancar el coche este verano, dedica un minuto a comprobar que tu retrovisor esté libre de adornos. Un gesto que, aunque parezca excesivo, puede evitarte un disgusto económico, la pérdida de puntos y, sobre todo, contribuirá a que llegues a tu destino de forma segura.