David Clavijo, el alcalareño que triunfa en el New Age

Para los profanos, la música New Age, puede tener como referencia Mike Olfield o Vangelis, pero la labor creativa de David Clavijo es un amplio compendio de influencias y fascinación musical . A medida que viaja por el mundo y que conoce nuevos sonidos los incorpora a su acervo musical, lo destila y los suma al resultado final de sus composiciones. Músicas e instrumentos que por la vía digital va encajando en sus composiciones. El resultado es un sonido que muchos emplean para relajarse, pero que también tiene la capacidad de evocar lugares y sensaciones.

David Clavijo se inició en la música a través del pop y con 16 años colaboró como bajista en bandas sonoras de cortometrajes, además de formarse como guitarrista. Pero su estilo definitivo lo encuentra en el New Age, una música que le permite aunar todas las influencias que recibe y que le da carta blanca para emplear el sonido de instrumentos de lo más diverso .

Con todos estos elementos busca dar cumplimiento a la definición de la música que él mismo hace: «espiritualidad, abstracción, salud, inspiración y la mejor manera de unir a todos los seres humanos en respeto, paz y armonía».

En su segundo álbum de estudio, David Clavijo presenta un aire renovado en su música, al tiempo que mantiene la riqueza musical de su primer trabajo. De esta forma, nos sumerge en un viaje musical por la música étnica aderezada con toques electrónicos y clásicos. Un disco en el que ha incluido una mayor instrumentación con respecto al primero y en el que existe más protagonismo de las guitarras, un instrumento con el que ha crecido. De hecho hay algunas partes del disco que están hechas con su primera guitarra, la que le regalaron cuando tenía 8 ó 9 años y que aún conserva.

Para dar forma a esta nueva creación se ha rodeado de grandes artistas, como el pianista norteamericano Chad Lawson ; el gaitero de la banda irlandesa Lúnasa, Cillian Valley ; el flautista canadiense Ron Allen ; el saxofonista Premik Russell y las voces de Charlee Brooks, Laura Powers y la cantante española R osa Cedrón de Luar na Lubre.

El nuevo disco combina elementos musicales muy diversos, pero todos de gran riqueza para configurar una composición original y distinta en la que todos quedan integrados a la perfección. Así, pueden escucharse en las composiciones el canto de los indios nativos americanos o la solemnidad de los cantos gregorianos . Y una amplia variedad de instrumentos de todo el mundo, como los mágicos sonidos de diferentes flautas del mundo, como la famosa flauta japonesa Shakuhashi, el calor del Low y Tin Whistle irlandés o de la Kena. Todo ello siempre acompañado por las guitarras y sintetizadores de David Clavijo.