El icónico maridaje del arte: José Carreras y Sara Baras
Un recital de de flamenco y canción española inaugura el festival en la Plaza de España
Sara Baras y José Carreras, anoche sobre el escenario del Icónica Fest Sevilla
Anoche parecía como si la Feria de Sevilla hubiera vuelto al Prado y la gente se paseara entre las luces por la plaza de España y aledaños. No era la Feria, pero sí el Icónica Sevilla Fest del que el diario ABC de ... Sevilla es medio oficial, el que llenó de luces y gala la plaza de España, y también de terracitas con experiencia gastronómica de nueva y original cocina que el público agradeció abarrotando los veladores de alrededor de la plaza. Noche que amenazaba tormenta por los relámpagos que a lo lejos se fueron perdiendo, aún así, algunos precavidos lucían paraguas.
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El Icónica Sevilla Fest comenzaba de esta forma su andadura que llegará hasta el diez de octubre con la presencia de dos «icónicos» artistas en escena: el tenor José Carreras y la bailaora Sara Baras .
El maridaje, por insólito resultó una firme fusión de géneros , por un lado las canciones de Falla, Albéniz, Gustavino , junto a los poemas de Lorca , y el flamenco de la bailaora gaditana y su cuerpo de baile de cinco mujeres.
El atrás del flamenco inmenso, con la presencia de una vibrante percusión y el siempre genial Diego Villegas, sobre todo en el paso a dos en el que improvisó al saxo «Sevilla tiene un color especial», para que Baras le pusiera sus trepidantes pies.
Con anécdota incluida en el «Anda jaleo» y el olvido de una letra que solventaron en escena con energía, el recital incluyó algunas de las canciones que Argentinita y Federico hicieran populares, como «Los cuatro muleros», «Los mozos deMonleón», «Sevillanas del siglo XVIII», las conocidas «Paño Moruno», «Polo» y «La seguidilla murciana» de Manuel de Falla.
Sara Baras le baila al tenor, salen juntos, se posan cerca del piano, y ella remata a su lado, con elegancia. Es como si hubieran orquestado un paso a dos en el que el grupo de percusión fueran los pies de la bailaora.
La visceralidad del tenor encuentra en el quiebro de la gaditana el punto justo para que en escena haya ese calor que necesita la música española de aquella época dorada.
El público está rendido, y más cuando suena el «Concierto de Aranjuez», y a continuación bailan las sevillanas el cuerpo de baile que remata Sara Baras por bulerías para poner más fiesta en el ambiente. Nuevo remate, esta vez en la voz de José Carreras con el famosísimo «Granada» . Los aplausos por sevillanas resuenan en la plaza que diseñara Aníbal González , que anoche lució en varios colores, esos tan especiales que tiene Sevilla.
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