Reloj de arena
Willy Blázquez: el currante de la generación X
La única muchachita que se le atravesó fue la muy insoportable Victoria Beckham, que no dejaba de dar la barrila durante la grabación de un spot en la Plaza de España
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónUna manera castiza de perfilar a este personaje sería decir que tiene más calle que las farolas, más copas que el Real Madrid y más platós que Hollywood. En todos esos escenarios, Willy Blázquez , hijo del recordadísimo y brillante compañero de ABC ... José Antonio Blázquez , no pasó desapercibido. Pertenece a esa generación X de la Sevilla de los noventa que aprendió a tablear en Matalascañas con Julio Moreno . Ocurre que, lejos de ser una víctima generacional de aquella quinta sin curro, salió listo como una criptomoneda, divertido como una juerga en el Kangaroo y aventurero como un Indiana Jones de Heliópolis. Poniendo copas en el Wind, voló sobre las olas de la noche sevillana, compartiendo momentos sublimes con Terry White , Bosco Abascal , Pintinho , Silvio , Maxi Moreno y Abelardo . Lo mejor de cada casa en su estilo. Un día entendió que había otras faunas que tratar y conocer. Y dejó en el Wind a los águilas y aguiluchos de las noches locales para irse con Castroviejo a Venezuela, a una estación biológica, a tratar con jaguares, cocodrilos, anacondas, pumas… Realmente no sé decir qué fauna era más peligrosa. Si la que dejó en el Wind o la que se encontró en el llano venezolano. El caso es que de ninguno de los dos territorios salió para la enfermería.
En el llano venezolano aprendió a torear situaciones límites. Y eso llevaba ganado cuando cayó de pie en la tele de la Expo, la que dirigía Fernando García Delgado . Entre otras responsabilidades le cupo la de gestionar los cochecitos eléctricos, aquellos que acababan aparcando delante del Kangaroo para ponerle fin a la gozadera de la noche universal. Fernando García le imploraba, con su voz doctoral de la vieja escuela de Radio Nacional que, por favor, hiciera todo lo posible para que no aparcaran juntos, que daban muy mala imagen y los periodistas estaban a la que caían. Si algo nunca tuvo Willy fue mala imagen. Por su cara bonita se encalomó en una fiesta en Nueva York con la protagonista de ‘Splash’ , aquella sirena rubia llamada Daryl Hannah ; las niñas se rifaban sitio para montarse en su mehari rojo y darle la vuelta al ruedo de Sevilla exhibiendo trofeo y, con la hija de un comandante del Ejército, se plantó delante de las cámaras de la tele para participar en un programa titulado ‘Ya sé que tienes novio’ . Algunos ficheros apuntan que también triunfó con una alemana mucho mejor equipada que Ángela Merkel, dónde va a parar. La única muchachita que se le atravesó fue la muy insoportable Victoria Beckham , que no dejaba de dar la barrila durante la grabación de un spot en la Plaza de España. El rodaje era para promoción de la Pepsi. Y reunieron a los futbolistas más tops de entonces: desde Roberto Carlos a Maldini . Pero la Spice girl no encontraba su sitio, se sentía molesta, aturdida por el personal que se concentró para ver a tanto galáctico como aparecían en el spot. Willy, a través del mánager, tuvo que invitarla a que se fuera al hotel, que allí pintaba poco. Victoria, aunque metió más de un gol en su vida artística, no estaba llamada para aquella convocatoria.
Tratar con famosos tiene eso. Y el paso por el audiovisual, como productor de filmes y spots publicitarios, ensanchó su agenda de situaciones. Inolvidables casi todas, irreproducibles muchas. Durante la grabación de la película ‘La duquesa roja’ , dirigida por Paco Betriu , donde se dio cita un elenco más peligroso que la fauna venezolana, pasaron cositas. Una de ellas protagonizada por Javier Gurruchaga . «Viaje con nosotros si quiere gozar, viaje con nosotros a mil y un lugar», debería de estar pensando el vasco cuando, en un ensayo en el casino Peña Giraldilla de Carmona, cogió una bola de billar y la estrelló contra una cristalera de cuatro por seis metros. Era un ensayo. Nadie lo estaba grabando ni el director dio orden alguna. Pero Javier tiró la bola contra la cristalera y acertó de pleno. En esa misma grabación, el líder de la Orquesta Mondragón tenía una escena donde estaba obligado a darle unas yoyas en el rostro a El Brujo , que formaba parte del cartel. Javier, que era perversito por definición, se pasó con la intensidad y le puso al Brujo la cara con más coloretes que la de Heidi. En la película ‘Manolete’ , del holandés Menno Heyjes , el actor Adrien Brody interpretaba al torero cordobés. Para cogerle el punto al personaje, Willy le buscó a Cayetano Rivera para que, en la finca de Espartaco, le enseñara a caminar como un torero, a vestirse como un torero y a dar pases de salón como un torero. Brody también acabó pidiéndole a Willy un audio porque estaba encantado con su inglés andaluzado. La película no pudo ser estrenada en España por problemas laborales con el tipo que hizo los decorados.
Pero en España sí que hemos visto la multitud de portadas discográficas y de videoclips que ha firmado el fotógrafo Anton Corbjin . Por ejemplo, la que hizo para U2. O para Santana. O para Talking Heads. Corbjin se empeñó en hacerle creer a Willy que era hermano de sangre de José Mercé y tan gitano como él. Los artistas tienen mucha imaginación. A veces tan desquiciada como el empeño genético de Corbjin. Willy sigue siendo el tío de la generación X a la que nunca le faltó el curro . Ahora busca localizaciones para Armani, la Rolls, Porsche, Vogue, BMW, Audi… Pero la localización que le llega al alma está en Los Caños, donde se cruza con Eduardo el de Triana y con el Ketama Antonio Carmona , mientras deja los avíos del wind sur en el chiringuito Ohjubeach. Me confiesa que no ha visto por allí ninguna sirena rubia, quizás porque la que tiene es auténtica y no de piscifactoría…
Límite de sesiones alcanzadas
- El acceso al contenido Premium está abierto por cortesía del establecimiento donde te encuentras, pero ahora mismo hay demasiados usuarios conectados a la vez. Por favor, inténtalo pasados unos minutos.
Has superado el límite de sesiones
- Sólo puedes tener tres sesiones iniciadas a la vez. Hemos cerrado la sesión más antigua para que sigas navegando sin límites en el resto.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete