Podemos pide la protección de los naranjos de Sevilla como bien de interés cultural

En el escrito de la moción donde se justifican los motivos de la propuesta, Podemos hace un recorrido sobre la historia y propiedades de este árbol y como sus flores (azahar) son señas de identidad de Sevilla. «El naranjo se comienza a emplear en Sevilla, con carácter ornamental, a partir del siglo X, durante la dominación árabe, que pretendían que los patios y jardines de la ciudad igualaran en belleza y grandiosidad a los de Damasco y Bagdag, donde este árbol ya ocupaba un sitio preferente». Si bien el escrito señala a los romanos como la civilización que introdujo por primera vez este árbol de procedencia china.

El número de naranjos en el viario público, cuya fruta es recogida por el Servicio Municipal de Parques y Jardines supera los 45.000 ejemplares; lo que supone un 25 % del arbolado municipal. Desde Podemos recogen el malestar de distintas asociaciones vecinales y colectivos proteccionistas con cuestionan el sistema de poda y cómo éste se está reduciendo con el consiguiente impacto medioambiental: «Son cortados (no podados) en plena floración con el azahar en el árbol (...) Las malas lenguas dicen que al no tener valor las naranjas y tener que recogerlas el Ayuntamiento, si se reduce el azahar hay menor frutos y el trabajo de recogida es menor».

El grupo municipal va a proponer en el pleno que se eleve una petición a la Consejería de Turismo para que inicie un expediente que concluya con la declaración del naranjal de Sevilla como bien de interés cultural como elemento ornamental emblemático de la ciudad e intrínseco de la trama urbana y del paisaje». No sería la primera vez que se busque una declaración de este tipo para una especie vegetal. En Jaén trabajaron para que la Unesco declarara patrimonio de la humanidad al olivar, pero finalmente la Diputación jiennense decidió retirar la candidatura ante las reticencias de algunos agricultores que temen que la declaración conlleve restricciones en sus actividades.