El alcalde de Sevilla encarga el informe técnico para remodelar la Ronda Urbana Norte

De esta forma el gobierno municipal da un paso decisivo para la transformación de una de las principales vías de circulación de la capital, con la que se pretende integrarla más en los barrios que cruza y, de forma indirecta, ganar en seguridad vial tanto para los miles y miles de vehículos que usan la Ronda Urbana Norte como para los peatones que la cruzan, tras protagonizar durante años una de las carreteras negras de Sevilla en cuanto a siniestralidad.

Con fecha del pasado día 5 del mes en curso, se firma por la Gerencia de Urbanismo la orden para abrir el procedimiento de licitación del servicio de asistencia técnica para análisis, estudio de alternativas y redacción del anteproyecto de reordenación y mejora de la integración urbana de la Ronda Urbana Norte, con un presupuesto de 117.956 euros (IVA incluido).

La Ronda Urbana Norte soporta una evidente sobrecarga circulatoria, entre otros motivos, por el retraso que acumula la ejecución de la segunda ronda de circunvalación de Sevilla, la SE-40, lo que evitaría que un alto número de trayectos entre distintos puntos de la ciudad se desarrollasen por la futura vía metropolitana. Mientras el Gobierno acelera el ritmo de desarrollo de la SE-40, el gobierno de Sanz ha dado un paso adelante para llevar a cabo un plan de alternativas que permitan mejorar las condiciones de tráfico que soporta esta zona norte de la ciudad. Para hacer frente a esta situación, el Ayuntamiento ha adoptado casi de forma paralela dos decisiones para, por un lado, reactivar la construcción de la SE-35 y en concreto un tramo del arco norte de esta ronda intermedia a modo de 'bypass' entre la SE-30 y la SE-20 (también conocida como Ronda Supernorte); y por otro, la contratación del estudio de alternativas y reordenación de la Ronda Urbana Norte que favorezca su definitiva integración urbana.

Así pues, tras la adjudicación el pasado mes de mayo del contrato para el estudio del anteproyecto constructivo de la Ronda SE-35 y la elaboración de un nuevo proyecto actualizado de trazado, el Ayuntamiento de Sevilla a través de la Gerencia de Urbanismo y Medio Ambiente inicia los trámites para contratar un análisis de la Ronda Urbana Norte.

Este paso, es especialmente «oportuno» en estos momentos, según fuentes municipales, al coincidir con las obras de la línea 3 del metro de Sevilla, en el tramo Pino Montano-Prado de San Sebastián, que van a afectar directamente a la Ronda Urbana Norte por tener que atravesarla o encontrarse anexa a ella.

Los principales objetivos que se persiguen con este proyecto, como ya se ha expuesto, son la reducción de la siniestralidad asociada a esta vía, así como los niveles de contaminación acústica y aérea, y facilitar la integración de los barrios ubicados a ambos márgenes, dado que la Ronda Urbana Norte en su actual configuración produce un efecto barrera.

Para ello se propondrán medidas encaminadas a mejorar la seguridad vial, impulsar la movilidad sostenible mediante la creación de carriles bici y la ampliación de acerados, y crear zonas verdes. La intención última es la transformación de la vía hacia un modelo de bulevar urbano, valorando distintas propuestas de remodelación en las que deberán atenderse, entre otras consideraciones, las incluidas en el Programa de la Bicicleta Sevilla 2020 para esta zona de la ciudad y, las enfocadas a la mejora de las conexiones con la SE-20 (Ronda Supernorte).

A este respecto, se realizará un diagnóstico de cada uno de los trayectos que componen la infraestructura, distinguiéndolos en función de criterios como su ubicación, tipo de sección o ámbito, así como de cada uno de los cruces, glorietas o puntos singulares existentes.

De manera especial, se apuesta por intensificar y mejorar la integración urbana en el tramo comprendido entre la glorieta de San Lázaro y la avenida Pino Montano, al ser considerado la parte más urbana de la vía; la glorieta Berrocal, a fin de mejorar el tránsito peatonal sobre la misma y favorecer su integración con el Parque Norte; y la intersección de la avenida Pino Montano con el paso inferior del Parque de Miraflores, donde se estudiará la posibilidad de prolongar este último hasta superar la propia avenida Pino Montano, realizando el cruce de la misma a distinto nivel.

De esta manera, el Ayuntamiento no descarta el soterramiento de, al menos, parte de la Ronda Urbana Norte, a pesar de que el alcalde lo descartó en su momento por motivos económicos. José Luis Sanz reconoció públicamente que el presupuesto alcanzaría los 400 millones, una cantidad elevada que «no estamos en disposición de permitirnos en estos momentos». Sin embargo, nunca llegó a enterrar el proyecto y los técnicos de Urbanismo, como se recoge en el pliego de condiciones de este estudio que ahora se licita, han estado analizando alternativas para satisfacer la reclamación de los vecinos.

El estudio encargado deberá concluir con un resumen comparativo de las distintas alternativas contempladas y con la selección de la más adecuada. La opción elegida se expondrá públicamente mediante un proceso de participación ciudadana, para que personas y colectivos interesados en el proyecto puedan conocerlo y realizar aportaciones al mismo. Cabe recordar que distintas iniciativas ciudadanas han realizado propuestas de intervención sobre esta ronda para mejorar sus condiciones urbanas que igualmente deberán ser analizadas durante el desarrollo de los trabajos.

Tras el proceso de participación, el consultor redactará el anteproyecto técnico en el que se desarrolle la alternativa seleccionada, que podrá incluir las conclusiones y sugerencias que hayan resultado del proceso participativo. Una vez definido y redactado el anteproyecto se planteará la estrategia de ejecución de la obra, por fases progresivas que afecten lo mínimo posible a la funcionalidad viaria de la vía. Urbanismo estima en ocho meses el tiempo de duración de este trabajo de estudio y análisis y ha valorado económicamente el mismo en 118.000 euros.