Las alergias ya no tienen temporada

La clave es que cada vez hay más polen y durante más tiempo. Las temperaturas más cálidas hacen que las flores florezcan antes, mientras que los niveles más altos de CO2 hacen que se produzca más polen, explica del Moral.

Los efectos del cambio climático en la temporada de polen se han estudiado en profundidad y, según algunos científicos, las temporadas de polen comienzan 20 días antes, son 10 días más largas y presentan un 21% más de polen que en 1990 , lo que significa más días de miseria con picazón, estornudos y goteo.

«Se ha modificado el periodo de polinización -reconoce Moral-. Se ha adelantado y los alérgicos están más expuestos, debido a la mayor cantidad, y durante más tiempo expuestos», dice.

¿La causa? De acuerdo con el trabajo de William Anderegg, de la Universidad de Utah (EE.UU.), el cambio climático causado por los humanos tiene un papel importante en el alargamiento de la temporada de polen y un papel parcial en el aumento de la cantidad de polen. Su investigación, publicada en PNAS, es un claro ejemplo de cómo el cambio climático ya está afectando la salud de las personas.

La alergia al polen es algo más que una simple molestia estacional: afectan a la salud respiratoria, tiene implicaciones para las infecciones virales, las consultas en Urgencias e incluso el rendimiento escolar de los niños.

Aunque ha habido estudios que han sugerido que el aumento de la temperatura y el dióxido de carbono atmosférico, características del cambio climático causado por el hombre, pueden causar una mayor producción de polen, hasta ahora no se había analizado s las tendencias del polen a escala continental ni habían calculado la posible contribución del cambio climático.

« Este estudio revela esa conexión a escalas continentales y vincula explícitamente las tendencias del polen con el cambio climático causado por el hombre », asegura.

El alergólogo de la SEAIC incide en el importante papel de la contaminación. «La polución hace que las plantas tengan que modificar su metabolismo; de esta forma, producen proteínas de estrés que hacen que se desarrollen más rápidamente. Es su mecanismo de supervivencia ».

Esto, señala, «explica por qué en las ciudades hay más alergias, a pesar de que, haya menos plantas».

Pero a menudo se pasa por alto un elemento importante: «El polen está destinado a volar», asegura Annette Menzel, de la Universidad Técnica de Múnich .

Junto con sus colegas, estudió el transporte de polen en Baviera para comprender mejor cómo ha cambiado la temporada de polen con el tiempo. « El transporte de polen tiene implicaciones importantes para la duración, el momento y la gravedad de la temporada de polen alergénico », dice Ye Yuan, coautor del estudio.

Menzel y su equipo se centraron en Baviera, un estado en el sureste de Alemania, y utilizaron seis estaciones de monitoreo de polen diseminadas por la región para analizar los datos.

Los resultados se muestran que ciertas especies de polen, como los de los arbustos de avellano y los alisos, adelantaron el inicio de sus estaciones hasta 2 días por año, durante un período de 30 años (entre 1987 y 2017). Otras especies, que tienden a florecer más tarde en el año, como el abedul y el fresno, cambiaron sus estaciones 0,5 días antes en promedio cada año, durante ese mismo período de tiempo.

El polen puede viajar cientos de kilómetros y, con los patrones climáticos cambiantes y la distribución de especies alterada, es posible que las personas estén expuestas a especies de polen "nuevas", es decir, polen que nuestros cuerpos no están acostumbrados a encontrar cada año.

Menzel dice además que la temporada de polen puede ser incluso más larga de lo estimado según las observaciones de la floración « teniendo en cuenta el transporte de polen, como se ha hecho en nuestro estudio actual ».

En España, comenta del Moral, estamos observando que el periodo de polinización de 2 0 3 meses se está prolongando hasta los 5 meses.

Y añade otro dato relevante. El número de personas con multialergias está en aumento. «Antes una persona era alérgica a una sola cosa y ahora hay personas que pueden estar con alergia casi todo el año», concluye.

No hay que olvidar que se calcula que en España hay cerca de 12 millones de personas con algún tipo de alergia al polen.