Un español viaja al Valle de la Muerte: «Advertencias de muerte por todas partes»

En uno de sus últimos vídeos, el influencer se traslada hasta el Valle de la Muerte, enclavado en el este de California y extendido hacia zonas del suroeste de Utah, el sur de Nevada y el noroeste de Arizona. Este árido valle ostenta el récord de la temperatura más alta jamás registrada en la superficie terrestre: 58,1 grados centígrados.

La combinación de altísimas temperaturas, suelos desecados y escasa vegetación hace de este espacio un territorio hostil. La exposición prolongada al sol en estas condiciones puede derivar en golpes de calor, deshidratación severa e incluso la muerte. A pesar de ello, el Parque Nacional del Valle de la Muerte atrae cada año a miles de turistas, fascinados por su brutal belleza y los enigmas que esconde.

En un vídeo de 16 minutos de duración, Pau Clavero explica en sus inicios que en la zona recomiendan no caminar después de las 10 de la mañana por las altas temperaturas: «el pueblo más caluroso del mundo», dice el influencer, que se encuentra en esos momentos a las 11:20 horas y pretende llegar hasta una zona caminando para explicar algunas curiosidades del lugar.

«El problema no es solo el calor, sino es que al estar en un salar, el reflejo del sol es loquísimo», dice el joven, que se sitúa instantes después en la cuenca de Badwater, el punto más bajo de Estados Unidos (85 metros por debajo del nivel del mar).

Cabe destacar que un salar es una llanura plana cubierta de sal y otros minerales, generalmente de color blanco, que se forma por la evaporación de un lago salado en regiones áridas o semiáridas.

A 11 millas de allí -unos 17 kilómetros - se encuentra el pueblo de Furnace Creek, en el que viven cerca de 100 personas aisladas en este gran desierto. La gran ciudad más cercana a la calurosa zona es Las Vegas, de la que dista apenas 259 kilómetros.

Por ello ésta es una de las excursiones típicas desde la 'ciudad del pecado'. Otras excursiones típicas es ir desde el Parque Nacional de Yosemite (434 kilómetros por la 120 hasta Lee Vining) o hacer un desvío desde la mítica Ruta 66.

«Este coche se está desintegrando al llevar aparcado aquí mucho tiempo», cuenta el joven creador de contenido, que llega hasta la zona en la que se encuentra el Centro de Visitantes.

«En esa casa vive alguien y mira donde estamos, en la nada», cuenta sorprendido el influencer que dice estar todo el día con el aviso de calor en la cámara: «advertencias de calor por todas partes, advertencias de muerte por todas partes; si decides hacer una excursión en alguno de estos Trekkinn que hay aquí cercanos, y te pilla con poca agua o poca prevención, te puede dar un golpe de calor o te deshidrates, y no puedan venir a buscarte en unas horas», advierte Clavero, que muestra cómo existe allí un campo de golf, una cancha de tenis u otra de baloncesto, algo excepcionalmente inusual.

«Es el sol más fuerte que he vivido en mi vida, me quema la piel», dice el creador de contenido, que durante la grabación se introduce en la zona donde acuden los turistas, con tiendas y restaurantes con aire acondicionado en las que se agolpan los acalorados visitantes.