Un dentista indica los cuatro supuestos en los que cambiar el cepillo de dientes

Cada vez que lo utilizamos quedan en las cerdas restos de saliva, comida y bacterias que, con el tiempo, pueden multiplicarse si no se enjuaga y seca bien. De este modo, resulta primordial limpiarlo después de cada uso y guardarlo en un lugar seco y protegido.

Porque dejar el cepillo expuesto al aire libre dentro del baño es un error común y del que muchas personas no están lo advertidas que deberían. Especialmente, si el cepillo se deja cerca del inodoro o del lavabo es muy propenso a la presencia de gérmenes. Ya solo con la acción de tirar de la cadena pequeñas partículas contaminadas pueden dispersarse en el aire y depositarse sobre las cerdas, de ahí que un consejo es guardar el cepillo de dientes en un estuche, aunque para ello debe estar completamente seco.

Además de su limpieza, es esencial sustituir el cepillo de dientes cada cierto tiempo, incluso en el caso de que este se encuentre en aparente buen estado. Con su utilización diaria las cerdas se desgastan y dejan de realizar la limpieza con la misma eficacia que en sus primeros usos, provocando que, a pesar de lavarnos los dientes, no los estemos limpiando y permita la aparición de caries u otras enfermedades de las encías.

Por lo tanto, los dentistas recomiendan a los pacientes reemplazar el cepillo de dientes cada cierto tiempo para gozar de una correcta salud bucal. Cuidar el cepillo no deja de ser la manera más sencilla de evitar infecciones, así que toma nota de los cuatro supuestos en los que debes cambiar tu cepillo.

Lo cierto es que no solo conviene sustituir el cepillo después de un determinado periodo de tiempo, sino que se pueden dar otra serie de circunstancias por las que se recomienda dejar de utilizarlo.

Un odontólogo, a través de la cuenta de TikTok de la Clínica Dr. Franco, ha indicado los cuatro supuestos en los que cambiar el cepillo de dientes.

Entre las recomendaciones más importantes destaca el cambio de cepillo cada tres meses. «Aunque no esté muy usado», indica este dentista. Otro de los consejos es sustituirlo «cuando las cerdas están muy desgastadas», sin la necesidad de que se hayan cumplido esos tres meses.

Asimismo, según el dentista, conviene también cambiarlo después de una gripe o resfriado. El cepillo puede quedar contaminado con los virus que causaron la infección, y, si se sigue utilizando después, existe la posibilidad de reinfectarse.

Por último, recomienda utilizar un cepillo nuevo «después de una limpieza profunda en clínica» con el objetivo de «mantener tus dientes y encías protegidos».