Va a hacer la compra a Mercadona y se queda sin palabras con lo que le pasa por ir a coger productos sin su carro: «Fueron segundos»

Lamentablemente, la experiencia también puede ser negativa. Olvidarse alguna pertenencia en un lugar tan concurrido puede significar su pérdida total. Pero, también, puede suceder que directamente esta sea sustraída por otro cliente. Y ya no hablamos solo de dinero o productos ya pagados.

Una usuaria ha denunciado en TikTok (su perfil es merche_mallorca) un robo insólito que ha vivido recientemente mientras realizaba la compra junto a su nuera.

Según relata en su vídeo, habían colocado sus bolsas reutilizables en la perchita del carro y, en cuestión de apenas unos segundos, alguien se las llevó sin que se dieran cuenta. La mujer ha compartido su frustración en sus redes sociales.

En su testimonio, con tono irónico al principio, realizó la siguiente exposición de los hechos: «Momentazo el que me ha pasado hoy en Mercadona. Iba a comprar con mi nuera, llevaba mis bolsitas. Llego, cojo un carro pequeño y cuelgo las bolsas en la perchita esta que tienen. Vamos metiendo productos en el carro y en una de esas dejamos el carro como en un lado del pasillo…», describe.

Lo que parecía un día más de compra se convirtió en un episodio de incredulidad cuando descubrieron que las bolsas habían desaparecido. No por fruto de un descuido de otro cliente. «Y no es que alguien haya confundido nuestro carro y se haya llevado nuestro carrito con las bolsas, que puede pasar, porque todos los carros y todas las bolsas son iguales. Pero no, nos han robado en nuestra cara tres bolsas chuchurrías colgadas de la percha», decía, riéndose debido al estado de las bolsas.

Un tipo de hurto que genera desconfianza pero que no es el más habitual en una de las cadenas de supermercados más populares de nuestro país. Eso sí, cada vez es más frecuente la sustracción de carteras, mochilas o, incluso, bolsas reutilizables. Objetos sin un gran valor económico pero esenciales para el consumidor, cuya reacción principal es la incredulidad por lo absurdo del incidente.

De ahí que en el vídeo, la usuaria se pregunta con cierta resignación: «¿Esto le pasa a alguien o estas cosas solo nos pasan a nosotros?» Por los comentarios se puede verificar cómo otros clientes han sufrido el robo de mochilas o, incluso, bastones junto a la caja del supermercado.