Los nazis se lo ponen mejor al público que Moreno y León de Aranoa

Moreno lo concede de entrada: «la película es difícil para el público» y «probablemente» no habría alcanzado la Berlinale «de no haber sido porque venía empujada por "El custodio"», el filme con el que el realizador obtuvo el premio Alfred Bauer en 2006. Y asume que no se imagina «debutando en una sección oficial de un festival» con un filme como éste.

«Un mundo misterioso» padece de similar lentitud a «El custodio», siendo una película «que renuncia a todo virtuosismo visual», reconoce el joven director. En ella sitúa a «un individuo que opta por brindarse al ejercicio de la libertad errática cuando una mañana se rompe de pronto una situación que creía estable», un planteamiento que puede conducir a muchos lugares, no siempre de interés inmediato para todo el público.

Fernando León de Aranóa ha presentado en Berlín su «Amador», de la que explica que «habla sobre gente que hace las cosas empujada por la necesidad» en un mundo en que «todos estamos en las mismas». La trama se desarrolla en torno a la cuidadora inmigrante de un enfermo, cuya muerte la deja «enfrentada a una situación que compromete su situación vital» y en la que prosigue «saliendo adelante por mera supervivencia».

Aranoa dice haber pivotado sobre la muerte para hablar «principalmente de la vida y del amor», que mueven a su protagonista, y dice haberse interesado más por «cuestiones de carácter universal, como la lucha ética entre los principios, las circunstancias y el sentimiento de culpa» antes que por la trama dramática, lo que según las críticas puede no haberle ayudado todo lo necesario, a parte la gran actuación de Magaly Solier, «que lo dice todo en la mirada».

Una intriga no exenta de sátira sobre judíos y nazis, vista por un austríaco, ha tenido mejor recepción pese a que la Berlinale no es lugar capaz de tomarse a la ligera ningún guiño sobre el nazismo y el holocausto. De hecho, la comedia «Mein Führer - La verdad sobre Adolf Hitler» recibió un duro repaso y, el año anterior, «Jud Süss» fue pateada en el festival.

Si en ésta, el actor Moritz Bleibtreu hacía de Joseph Goebbels, en «My best friend» representa a un judío que es primero recluído en un campo, y luego hecho salir por un mismo amigo de infancia que se ha hecho de las SS. El director reconoce que «por el pasado no creía que un tema así pudiese ser abordado de otro modo que "La lista de Schindler"», pero ¿cómo hacerlo en una historia en que quería que el amigo judío «resultase el héroe»? se preguntó Murnberger.

Era difícil porque «quería mostrar una historia de ficción sobre un fondo de historia real», pero reconoció: «me he atrevido porque soy un director austríaco. Tenía curiosidad por ver cómo sería acogida en Alemania», explica el director sobre la tragicómica trama, en torno a un cuadro, falsamente atribuído a Miguel Ángel, y que el antiguo amigo en las SS sabía que se encontraba en la galería de arte de los padres de su viejo amigo judío, al que él había enviado a un campo de concentración y ahora necesita para hallar el auténtico.