EE.UU. está enviando la primera gran remesa de inmigrantes de origen hispano –281 nicaragüenses y venezolanos procedentes de Costa Rica– que España acogerá tras el acuerdo entre Joe Biden y Pedro Sánchez, destinado a aliviar la presión migratoria sobre la frontera sur de ese ... país. La medida forma parte de la creciente consideración de los flujos migratorios como si fueran flujos comerciales, cuando estamos hablando de personas dotadas de una dignidad. La propia Unión Europea ha caído en esta tropelía en su reciente pacto migratorio, esponsorizado por la presidencia española, al considerar válido el juego de compensaciones económicas entre países que acepten y que rechacen contingentes de inmigrantes. A esto se suma que resulta increíble que un Gobierno que no es capaz de gestionar en su propio territorio avalanchas migratorias como la que vive Canarias y que enfrenta crecientes problemas en su gestión, vaya dando lecciones y tratando de solucionar los problemas de otros.
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