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EL CONTRAPUNTO

Sánchez perpetra otro libro

Puestos a alimentar la infinita vanidad de nuestro 'Napoleonchu' patrio, habría sido más decente recurrir a Chat GPT

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Isabel San Sebastián

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Quienes no conozcan a Matilde Asensi tal vez se sorprendan al buscar en Google 'Tierra firme' y descubrir que aparece en primer lugar su trilogía de Martín Ojo de Plata titulada exactamente así, 'Tierra firme», y publicada en 2007. Lo que es tanto como decir ... que Pedro Sánchez le ha plagiado descaradamente el título para endosárselo a 'su' última obra de autobombo. Utilizo comillas con el posesivo, porque adjudicarle al presidente la autoría de ese libro, cuya cubierta está encabezada por su nombre y su retrato, es faltar de nuevo a la verdad y la honestidad. Al parecer, también en esta ocasión ha hecho las veces de 'negra' Irene Lozano, antiguo azote sanchista desde las filas de UPyD reconvertida en 'alter ego' literario del líder socialista a cambio de varios cargos generosamente remunerados en distintos organismos públicos. Nadie se me subleve por lo de 'negra' y apele a la 'racialización' y demás monsergas políticamente correctas. 'Negro' es la denominación que siempre se ha dado en el sector a los escritores a sueldo dispuestos a hacer el trabajo que otro firmará después. Un arreglo mutuamente ventajoso, cuyo requisito esencial es la coincidencia de los socios en la carencia de escrúpulos, la disposición a interpretar su papel hasta el final y un sentido de la dignidad no demasiado exigente. Porque pagar a alguien para que cante tus glorias sin hacerte sombra resulta tan poco decoroso como cobrar por realizar esa tarea servil. Puestos a alimentar la infinita vanidad de nuestro 'Napoleonchu' patrio, habría sido más decente encargar el texto a ChatGPT, proporcionándole las consignas adecuadas. La inteligencia artificial hace milagros, dicen sus partidarios. Yo, que pertenezco a la vieja escuela, me aferro al empeño de escribir, a costa de mucho esfuerzo, los libros que llevan mi firma y firmar únicamente aquello que he escrito yo. Lo demás me parece tramposo y por ende inaceptable. Sánchez, en cambio, se mueve en el terreno de la trampa como pez en el agua o, mejor dicho, la ciénaga. Ese es exactamente su hábitat.

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