El exdelegado de Seguridad debe explicar al juez «el clamoroso fallo de seguridad»

El primero en marcharse fue Pedro Calvo, exconcejal de Economía y presidente no ejecutivo de Madridec -empresa municipal propietaria del pabellón multiusos del Arena- en la que se celebró la fiesta el 1 de noviembre-, junto a la de Miguel Ángel Villanueva, exvicealcalde.

Una hora antes de su cita con el juez, a las 10 horas, todas las partes escucharán las llamadas que recibieron la noche de la tragedia -1 de noviembre- la Policía Municipal y la Nacional, adelantadas por ABC.

De Guindos dimitió el pasado 4 febrero, siete horas después de que el juez decidiera imputarle -junto a toda la cúpula municipal de de Seguridad y Emergencias-, al considerar que «hubo un aparante fallo clamoroso en las medidas de seguridad más elementales, por lo que algo tendrán que decir los máximos responsables del Ayuntamiento en la materia».

Así respondía López-Palop el pasado 23 de febrero al recurso presentado por el consistorio madrileño que rechazaba por su «falta de motivación».

Junto a De Guindos, imputó a su segunda, Fátima Núñez, exconcejal de Seguridad, Antonio del Álamo, director general de Emergencias y Protección Civil y Emilio Monteagudo, jefe de la Policía Municipal.

En su escrito, en primer lugar, el juez pedía explicaciones por la «celebración de un multitudinario botellón ilegal en un espacio público -el Madrid Arena-, y al hecho de que éste estuviera realizado por jóvenes -en evidente estado de embriaguez la mayoría de ellos-, de los que después, más de 2.000 irrumpieron en el recinto, lo que contribuyó a la posterior tragedia, siempre, sin ánimo de prejuzgar las situaciones producidas», indicaba el magiestrado en su escrito.