Zelenski propone en el Consejo de Seguridad medidas que limiten poder de Rusia en la ONU

Tras su enardecido discurso, el ucraniano abandonó la sala, en la sede del organismo en Nueva York, evitando un cara a cara con el enviado ruso. De hecho, este, el ministro de Exteriores del Kremlin, Sergei Lavrov, sólo entró en la sala desde el pasillo una vez se hubo marchado Zelenski. El embajador de Rusia ante la ONU, Vasily Nebenzya, ocupaba el asiento ruso en la mesa previamente.

Al tomar la palabra, Lavrov se refirió a Ucrania como «el régimen de Kiev», y lo retrató como una mera marioneta de EE.UU. También lo acusó de «nazismo», a pesar de que Zelenski es judío. «El régimen de Kiev no oculta su posición sobre el exterminio de rusos, y los países occidentales apoyan esto», dijo el veterano diplomático del Kremlin. Después advirtió a los presentes de que «el riesgo de un conflicto global va creciendo».

El Consejo de Seguridad es uno de los seis órganos principales de la ONU y tiene la responsabilidad de supervisar la seguridad internacional. En caso de conflicto, en teoría puede imponer sanciones o incluso autorizar el uso de la fuerza. Pero cinco países tienen asiento permanente en el Consejo y tienen por tanto la capacidad de vetar cualquier resolución: China, Francia, Rusia, Reino Unido y EE.UU.

Que Rusia esté en el Consejo de forma permanente explica la parálisis de la ONU tras la invasión de Ucrania, que ya suma más de medio millón de muertos, según cifras de EE.UU. Para Zelenski y otros, esa es la razón de la parálisis, aunque China, también con poder de veto, se ha alineado en diversas ocasiones con Rusia.

Zelenski propuso reformar el Consejo de Seguridad para ampliar los integrantes y eliminar además ese veto. «Los líderes mundiales buscan nuevas plataformas y alianzas que puedan reducir el desastroso alcance de los problemas, problemas que se encuentran aquí dentro de estas paredes con retórica en lugar de soluciones reales, con aspiraciones a comprometerse con asesinos en lugar de proteger vidas«, añadió el ucraniano.

Zelenski dijo que, aunque las resoluciones de la Asamblea General han reconocido que Rusia es la razón original de esta guerra, esto no ha significado ningún cambio para Rusia dentro del organismo.

Otros mandatarios ya han apoyado una reforma del consejo, que le reste poder a China y Rusia. El propio Joe Biden, presidente de EE.UU., propuso el año pasado ampliarlo a algún país emergente, de África o América Latina. El brasileño Lula da Silva aspira a que su país ocupe un nuevo asiento y gane un poder de veto.

Tras el discurso de Zelenski, otro invitado de un país neutral, el presidente suizo, reiteró la necesidad de una reforma. Alain Berset dijo que existe «una necesidad urgente de reforma, y Suiza ha estado comprometida durante varios años por una representación más amplia y mejor».

La Asamblea General, donde solo se necesita mayoría simple, sí ha condenado la invasión rusa repetidamente. Según dijo este miércoles el secretario general de la ONU, António Guterres, «la invasión de Rusia en Ucrania, en clara violación de la carta de las Naciones Unidas y del derecho internacional, está agravando las tensiones y divisiones geopolíticas, amenazando la estabilidad regional, aumentando la amenaza nuclear y creando profundas fisuras en nuestro mundo cada vez más multipolar».

En su turno de intervención, el ministro de Exteriores estadounidense, Antony Blinken, dijo que «Rusia comente crímenes de lesa humanidad a diario en Ucrania». El secretario de Estado sí permaneció en la sala para escuchar a Lavrov, que acusó a la Casa Blanca de orquestar desde la sombra el conflicto en Ucrania.

Putin se ha ausentado de esta Asamblea General, como lo ha hecho el presidente chino Xi Jinping. El régimen chino ni siquiera ha enviado a su ministro Exteriores. De hecho, este, Wang Yi, se vio con Putin en San Petersburgo este miércoles, informa AP.

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