Ruptura entre aliados: Polonia dejará de enviar armas a Ucrania
Varsovia reacciona así a las palabras pronunciadas por Zelenski en la ONU, con las que denunció que «algunos países fingen solidaridad con Ucrania, pero apoyando indirectamente a Rusia»
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Un militar ucraniano opera una ametralladora durante un entrenamiento cerca de la línea del frente en la región de Zaporiyia
El primer ministro polaco ha anunciado que su país no suministrará más armamento a Kiev, tras convocar «de urgencia» al embajador ucraniano en Varsovia para expresarle una protesta formal contra las declaraciones del presidente Volodímir Zelenski ante la Asamblea General de la ONU. « ... No suministraremos ningún armamento más a Ucrania, pues ahora estamos centrados en rearmar a Polonia con las armas más modernas», ha justificado Mateusz Morawiecki este giro militar y humanitario en declaraciones a Polsat News que están causando un gran revuelo entre los aliados occidentales.
Ha preferido no precisar en qué momento Polonia, uno de los principales proveedores de armas de Ucrania, ha dejado de suministrar armas y municiones a Kiev, ni si la decisión estaba vinculada con el conflicto sobre los cereales, pero sí ha dado por hecho que la interrupción del suministro ya se ha producido. "Nos concentramos ya principalmente en la modernización y el armamento rápido del ejército polaco, para que se convierta en uno de los ejércitos terrestres más potentes de Europa y en un plazo muy corto”, ha explicado.
Polonia no solamente es uno de los principales proveedores de armamento del ejército ucraniano, sino también territorio de acceso a las armas que envían a Kiev muchos otros gobiernos occidentales. En este sentido, Morawiecki ha tranquilizado acerca de la continuidad de los transportes por vía polaca. El centro militar situado en la ciudad de Rzeszow, por donde pasa todo el material occidental con destino a Ucrania, funciona con normalidad. «Nuestro centro en Rzeszów seguirá desempeñando el mismo papel que antes y en el futuro, de acuerdo con los estadounidenses y la OTAN», ha garantizado.
Varsovia reacciona así a las palabras pronunciadas por Zelenski en la ONU, con las que denunció que «algunos países fingen solidaridad con Ucrania, pero apoyando indirectamente a Rusia», en referencia seguramente a la decisión de Polonia, Eslovaquia y Hungría de importar cereales ucranianos, con el fin de proteger los intereses de sus propios agricultores.
El viceministro polaco de Relaciones Exteriores ha comunicado al embajador ucraniano que el presidente Zelenski se había abrazado a una «tesis falsa (...) y particularmente injustificada con respecto a Polonia, que ha apoyado a Ucrania desde los primeros días de la guerra», según el comunicado del Ministerio. La disputa sobre las exportaciones ucranianas de grano se ha agravado en los últimos días, desde que el viernes la Unión Europea anunció que ponía fin a la prohibición de la importación de cereales ucranianos decretada en mayo por cinco Estados del bloque (Polonia, Hungría, Eslovaquia, Bulgaria y Rumania), debido a las distorsiones que provoca en los mercados locales.
Polonia y Hungría ha impuesto embargos unilaterales, a los que Kiev ha respondido con la amenaza de un recurso ante la Organización Mundial del Comercio (OMC). Morawiecki, por su parte, amenaza con ampliar la lista de productos ucranianos vetados si se presenta finalmente ese recurso. La diplomacia ucraniana ha instado a Polonia a «dejar la emoción de lado» y a adoptar un enfoque «constructivo», según ha escrito en Facebook el portavoz Oleg Nikolenko. Zelenski está convencido de que, después de las elecciones polacas de octubre, Polonia adoptará de nuevo políticas más «responsables», atribuyendo así indirectamente a la campaña electoral en curso las medidas tomadas por Varsovia.
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