Recomponer y ensogar el grupo Wagner
EL ANÁLISIS TÁCTICO DEL GENERAL (R) PITARCH (29/08/2023)
Con demasiada frecuencia, en medios occidentales se citan como reales supuestos ataques y ganancias territoriales de la llamada contraofensiva ucraniana
Quiénes son y dónde ejerce su influencia el grupo Wagner
La letra pequeña del futuro del grupo Wagner y de Prigozhin
Con demasiada frecuencia, en medios occidentales se citan como reales supuestos ataques y ganancias territoriales de la llamada contraofensiva ucraniana. También repetidamente, los hechos posteriores desmienten tozudamente tales triunfos al no verse inscritos sobre el terreno. Lo más cierto es que los ... frentes se mantienen prácticamente inalterables desde hace muchas semanas. Ni las tropas rusas, en el norte, han llegado todavía a recuperar sus anteriores posiciones en la zona de Kupiansk y el río Oskil, ni las ucranianas, en el sur, han logrado agrandar su incipiente penetración en la de Robotyne.
La balanza operaciones-propaganda está francamente desequilibrada en favor de la segunda bien que, con ello, Kiev logre mantener la atención occidental sobre la guerra, esperando que Ucrania, con un apoyo occidental infatigable, será capaz de derrotar militarmente a Rusia. El problema es que, si tal hipótesis no se confirmara, una derrota ucraniana pondría en cuestión y arrastraría en su fracaso al propio sistema de seguridad occidental basado en la OTAN.
Este martes ha sido enterrado, en San Petersburgo, el líder del grupo Wagner, Prigozhin. Su fallecimiento en la catástrofe aérea del pasado 24 de agosto es un hecho íntimamente relacionado con la guerra. Ya fuera por accidente o por un derribo/atentado -a Biden le faltó tiempo para declarar: «no hay mucho que pase en Rusia en lo que Putin no esté detrás»―, la desaparición traumática de Prigozhin entraña un reforzamiento de Putin como líder indiscutible de Rusia.
Sin Putin y repleto de incógnitas: qué se sabe del funeral de Prigozhin
Previsiblemente se celebrará este martes o este miércoles en San Petersburgo
En el plano doméstico, el suceso ha despachado un mensaje disuasorio frente a la potencial emergencia de cualquier otro líder capaz de hacer sombra al patrón del Kremlin. Además, ha servido para contrabalancear el deterioro moral que, en el seno de las Fuerzas Armadas rusas, produjo el motín de los mercenarios wagneristas del 23 de junio pasado. En el plano exterior, la temeraria inclusión de Prigozhin y una parte sustancial de su plana mayor en el mismo vuelo ha dejado desmochado al grupo Wagner que, hasta ahora, ha sido instrumento esencial para la presencia, penetración y gestión de los intereses geopolíticos y económicos rusos en África. Algo que Moscú tendrá que recomponer y ensogar, mejor antes que después.
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