Israel ataca a Irán y se prepara para una guerra prolongada
Teherán revela que una víctima es el jefe de su Guardia Revolucionaria, además del programa nuclear. Trump advierte de «un conflicto monumental»
Trump alerta de un «conflicto masivo» entre Irán e Israel
Irán responde a la presión militar y diplomática con un órdago nuclear
Israel ha lanzado esta madrugada una operación militar de enormes proporciones contra Irán, sin precedentes en alcance ni en posibles consecuencias. Según la televisión estatal iraní, el jefe de la Guardia Revolucionaria, general Hossein Salami, figura entre los posibles muertos, junto a otro alto mando y dos científicos del programa nuclear.
Además, informa de que los ataques israelíes en Teherán y otras zonas del país han causado víctimas civiles. Según ese medio, los bombardeos también alcanzaron instalaciones en Natanz, donde se encuentra una planta nuclear, y en Khorramabad, sede de una importante base de misiles.
El ataque fue aprobado el lunes por Benjamín Netanyahu y su gabinete de seguridad, y comenzó este viernes de madrugada con operaciones aéreas y acciones encubiertas del Mossad en territorio iraní.
El jefe del Estado Mayor israelí, general Eyal Zamir, advirtió a Teherán y sus aliados en la región: «Quien intente desafiarnos pagará un precio muy alto». Israel se prepara ahora para una guerra que, según el propio Netanyahu, podía haber comenzado hace años.
La Guardia Revolucionaria de Irán es una fuerza militar paralela al Ejército regular iraní, creada tras la Revolución Islámica de 1979 para proteger el sistema teocrático del país. Tiene su propio mando, inteligencia, fuerza aérea, naval y una rama de operaciones exteriores llamada Fuerza Quds, encargada de apoyar a grupos aliados como Hezbolá en Líbano, los hutíes en Yemen o milicias en Siria e Irak.
Es considerada una organización terrorista por Estados Unidos desde 2019 y desempeña un papel clave en el aparato político, económico y militar del régimen iraní. La eliminación de su cúpula supone una escalada significativa del conflicto y abre la puerta a una posible represalia de gran envergadura por parte de Teherán.
Israel ha calificado el ataque de «preventivo», pese a las advertencias del presidente estadounidense, Donald Trump, de que una operación de esta naturaleza podría desencadenar un «conflicto masivo». El gobierno israelí ha confirmado que el objetivo fueron instalaciones nucleares y militares en territorio iraní. Todo indica que la Casa Blanca no participó ni fue consultada: Trump se encontraba en un picnic con legisladores cuando se produjo el ataque.

El ataque aéreo
de Israel contra Irán
Objetivo bombardeados
Tabriz
Varias oleadas de misiles impactaron en esta zona cerca de bases militares y un centro de desarrollo nuclear
Teherán
(zona
ampliada)
Turquía
Siria
Irak
Arabia
Saudí
Natanz
Impactos en el principal centro de enriquecimiento de uranio
500 km
Saadat Abad
Incendio en un rascacielos
Shahrak
Shahid
Mahalati
Farahzad
Edificio de viviendas colapsado
La vivienda de un alto mando militar
Base militar de Shian
Bid Kaneh
Columnas de humo procedentes de este enclave de desarrollo balístico
Base militar de Parchin
Fuente: NYT / ABC

El ataque aéreo de Israel contra Irán
Objetivos bombardeados
Tabriz
Varias oleadas de misiles impactaron en esta zona cerca de bases militares y un centro de desarrollo nuclear
Turkmenistán
Turquía
Irán
Teherán
(zona ampliada)
Siria
Irak
Israel
Natanz
Impactos en el principal centro de enriquecimiento de uranio
Arabia
Saudí
500 km
Saadat Abad
Incendio en un rascacielos
Shahrak Shahid
Mahalati
Farahzad
La vivienda de un alto mando militar
Edificio de viviendas colapsado
Base militar de Shian
Bid Kaneh
Teherán
Columnas de humo procedentes de este enclave de desarrollo balístico
Base militar de Parchin
20 km
Fuente: NYT / ABC
Netanyahu detalló que fueron atacadas la planta de enriquecimiento de uranio en Natanz, el programa de misiles balísticos y altos responsables del programa nuclear, incluyendo científicos. Aseguró que Irán trabaja en un nuevo plan para «destruir a Israel» tras el fracaso de su red de milicias en Oriente Próximo, algo que calificó de amenaza intolerable.
Un alto cargo israelí confirmó que, además de los intensos bombardeos de la Fuerza Aérea, el Mossad lideró una serie de operaciones de sabotaje dentro de Irán, dirigidas contra emplazamientos clave del programa de misiles y sistemas de defensa antiaérea, con el objetivo de limitar la capacidad de respuesta inmediata de Teherán.
La ofensiva eleva el riesgo de una guerra regional y se espera una respuesta de Irán en las próximas horas. Trump ha convocado a su gabinete de crisis en la Casa Blanca.
Horas antes, el OIEA censuró a Irán por su falta de cooperación, lo que provocó que Teherán anunciara la apertura de una tercera planta de enriquecimiento de uranio con centrifugadoras más avanzadas.
El ministro de Defensa israelí, Israel Katz, alertó sobre posibles represalias con misiles y drones contra civiles y declaró el estado de emergencia en todo el país.
Netanyahu justificó el ataque como una medida para «garantizar la supervivencia de Israel», advirtiendo que Irán ha acumulado suficiente uranio para fabricar hasta nueve bombas atómicas y está dando pasos inéditos para convertirlo en armamento. «Si no se le detiene, Irán podría tener un arma nuclear en pocos meses», dijo en un mensaje grabado.
Según fuentes citadas por CNN, el ataque tenía entre sus objetivos al jefe del Estado Mayor iraní, otros altos mandos y varios científicos nucleares, que habrían sido eliminados.
Trump, que desde abril negociaba un acuerdo de desnuclearización con Irán, había manifestado su oposición a una operación militar, alegando que podía echar a perder un acuerdo «bastante cercano».
El secretario de Estado, Marco Rubio, confirmó que Estados Unidos no está implicado: «Israel llevó a cabo una acción unilateral contra Irán. Nuestra prioridad es proteger a las fuerzas estadounidenses». Añadió que Trump ha tomado todas las medidas necesarias para proteger al personal estadounidense en la región y que Irán «no debe atacar intereses ni personal de EE.UU.»
En anteriores ataques, Israel se había limitado a responder a milicias aliadas de Irán. Esta vez, el objetivo declarado es impedir el rearme nuclear de Teherán.
Aún no hay detalles precisos sobre los objetivos alcanzados, pero se sabe que el ataque se produjo pasada la 03:00 hora local.
Irán cuenta con dos instalaciones nucleares principales: Natanz, de fácil acceso, y Fordow, mucho más protegida bajo tierra. Trump ordenó la evacuación de personal diplomático y militar de EE.UU. en Irak, Bahréin y Kuwait ante el riesgo de una escalada.
El Departamento de Estado autorizó la salida del personal no esencial, y el secretario de Defensa, Pete Hegseth, permitió la salida voluntaria de familiares de militares desplegados.
Trump afirmó que deseaba mantener relaciones comerciales con Irán, pero advirtió: «Si van a lanzar armas nucleares, no habrá acuerdo». Recordó que frenó una escalada entre India y Pakistán mediante llamadas y amenazas de sanciones.
Durante la campaña electoral, Trump prometió que con él en la presidencia no estallarían conflictos como los de Gaza o Ucrania. Esta vez, no ha logrado evitar la escalada entre Israel e Irán.
El Reino Unido ha emitido una alerta para embarcaciones en el Golfo Pérsico, el de Omán y el Estrecho de Ormuz. El petróleo Brent subió más de un 4% tras conocerse las evacuaciones.
Aunque Trump había pedido previamente a Netanyahu que aplazara una acción militar, la Casa Blanca teme ahora que la escalada haga imposible reanudar las negociaciones previstas en Omán.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete