Comienza el 'casting' para encontrar un compañero de papeleta presidencial

La semana pasada, la elección deJ. D. Vance por parte de Donald Trump como su compañero de 'ticket' presidencial tuvo que ver con una ambición por imponerse en los estados clave del 'cinturón del óxido' del Medio Oeste, el territorio del que proviene su candidato a la vicepresidencia. Y, también, aprovechar su juventud (Vance tiene 39 años), en medio de una campaña en la que la edad -no solo la de Biden; si Trump gana, batirá su récord de ancianidad en una victoria presidencial- ha sido un factor decisivo.

La vicepresidenta tendrá muchos nombres entre los que elegir, y ese cálculo político influirá en su decisión. Harris busca convertirse en la primera mujer en conquistar la Casa Blanca, la segunda persona negra (después de Barack Obama) y la primera persona asiática (es hija de jamaicano e india). Eso hace que la opción de Gretchen Whitmer -gobernadora de Michigan, estado decisivo, siempre en la lista de presidenciables- pierda enteros: muchos demócratas creen que un 'ticket' completamente femenino es demasiado arriesgado. O que no se barajen por el momento candidatos de minorías raciales. Tampoco es necesario un perfil muy joven, ya que Harris, con 59 años, no tiene problemas de edad.

Todo apunta a que el 'ticket' será completado con un hombre blanco y, a ser posible, de perfil centrista, capaz de ayudar en los estados bisagra, donde cuentan mucho los votantes moderados e independientes.

Una opción podría ser Josh Shapiro (51 años), gobernador de Pensilvania: además de ser de un estado decisivo, podría dar un marchamo de moderación a una candidata que los republicanos tachan de «radical». Un perfil similar sería el de Roy Cooper (67 años), gobernador de Carolina del Norte, un estado que los demócratas sueñan con arrebatar a los republicanos.

Tanto Shapiro como Cooper han tenido ya conversaciones con Harris, como también lo ha hecho Mark Kelly (60), exastronauta y senador por Arizona, otro estado clave.

Otros nombres que suenan son Andy Beshear, gobernador de Kentucky, un estado republicano; J.B. Pritzker, su homólogo de Illinois, siempre en la lista de los presidenciables; o Pete Buttigieg, secretario de Transporte y fenómeno demócrata en las primarias de 2020.

El proceso de elección de vicepresidente suele ser largo: se dedican meses a revisar el historial, las declaraciones fiscales y todos los muertos que los candidatos pueden tener en el armario. Harris y su equipo deberán hacerlo a toda prisa.