¡Que vienen los chinos!

Espoleado por su crecimiento económico, y sobre todo por su sed de materias primas y sus 1.300 millones de habitantes , el coloso asiático se ha abierto al exterior y la presencia china se aprecia ya en todo el planeta. Siguiendo este rastro por 25 países de Asia Central, el Sudeste Asiático, África y Latinoamérica, dos periodistas españoles han efectuado la que, hasta la fecha, es la más completa investigación sobre dicha expansión en el libro «La silenciosa conquista china», publicado por la editorial Crítica, de Planeta.

Los autores son Juan Pablo Cardenal (Barcelona, 1968) y Heriberto Araújo (Barcelona, 1983), dos reporteros con años de experiencia como corresponsales en China que han recorrido 220.000 kilómetros para realizar 500 entrevistas en lugares tan dispares como la Venezuela de Chávez , el Irán de los ayatolás, el convulso Sudán o la hermética Birmania. En su periplo por África les ha acompañado el fotógrafo Luis de las Alas , responsable de la cubierta y de las vistosas imágenes del libro que muestran a los trabajadores negros con sus compañeros y capataces chinos.

Desde las minas de cobre del Congo y los yacimientos de gas natural en el desierto de Turkmenistán hasta los bosques de Siberia y las grandes infraestructuras en la Amazonía ecuatoriana o el Nilo, Cardenal y Araújo cuentan a través de historias humanas los efectos socioeconómicos, ecológicos y geopolíticos de la muda pero imparable expansión china.

«Sería injusto catalogar la conquista china del mundo como colonialista pero, en aquellos países en vías de desarrollo donde la ley tiene poca fuerza, las instituciones son débiles y no hay apenas sociedad civil, su forma de hacer negocios sí que se parece al neocolonialismo, sobre todo por arrasar los recursos naturales sin generar riqueza entre la población», explica Juan Pablo Cardenal, quien actualmente reside en Hong Kong en su octavo año en Asia y ha sido corresponsal de los diarios «El Mundo» y «El Economista».

A su juicio, lo positivo de este fenómeno es que «ha dado una alternativa al mundo en desarrollo gracias a sus infraestructuras, sus préstamos, sus compras a largo plazo de materias primas, la creación de empleos y al abastecimiento de productos "Made in China" a precios más que competitivos en países con bajo poder adquisitivo». Con él coincide Heriberto Araújo, quien cree que « China ha eliminado el término "Tercer Mundo" de un plumazo , devolviendo a África al debate entre Europa y Estados Unidos y aportando una visión fresca y renovadora sobre cómo solucionar los problemas de los países pobres».

Sin embargo, ambos señalan que lo negativo es la exportación de las miserias del modelo chino. «El mantra del desarrollo económico a cualquier precio, sin importar los efectos secundarios, los abusos ni los excesos, permite un atajo al progreso, pero demuestra la poca importancia que el modelo chino da a las personas », asegura Cardenal.

Por su parte, Araújo advierte de «las devastadores consecuencias medioambientales y precarias condiciones laborales y sociales que hemos visto, por ejemplo, en las minas de hierro de Perú o en las obras de empresas chinas en Birmania y Angola», pero insiste en que lo peor de todo es «la injusticia, la alianza con la élite, la corrupción y la falta de ética en los negocios». «Si en su propio país tienen barra libre para actuar, ¿cómo no van a hacerlo en el África profunda o Venezuela?», se cuestiona de forma retórica Araújo, quien vive en Pekín desde hace cuatro años y trabaja como corresponsal de la agencia de noticias mexicana Notimex .

Su visión, crítica y combativa con el autoritario poder político que financia la expansión china, no les ha impedido confraternizar con los trabajadores que se lanzan a la aventura por todo el mundo en condiciones más que precarias con la única esperanza de labrarse un porvenir mejor. Con impactantes testimonios de primera mano, a ellos está dedicado el emotivo capítulo sobre la globalización de los «mingong» (currantes) para explicar el secreto del éxito de los infatigables emigrantes chinos.

Para contextualizar su obra, los autores también han investigado el opaco músculo financiero chino, su búsqueda desesperada de materias primas , el impacto ecológico de sus inversiones y sus interesadas alianzas con los regímenes menos recomendables del planeta.

Durante los dos últimos años, Juan Pablo Cardenal y Heriberto Araújo han invertido todos sus esfuerzos y buena parte de sus ahorros en una investigación pionera que ha dado sus frutos con este libro, imprescindible para conocer cómo se está forjando la futura hegemonía de China. «La silenciosa conquista china» es un hito del reporterismo en español que será traducido al inglés por la prestigiosa editorial Penguin y al francés por Flammarion , así como al holandés, polaco y mandarín en Hong Kong. Y, para el futuro, sus autores ya se plantean analizar la expansión china por ese mundo desarrollado que cada vez ansía con más fuerza los yuanes de Pekín para salir de la crisis.