La Liga Árabe reconoce a los rebeldes, que consiguen la descongelación de 350 millones de Gadafi

«Hemos acordado que ha llegado el momento de que Libia recupere su escaño legítimo y su lugar en la Liga Árabe. El CNT será el representante legítimo del Estado libio», anunció este jueves Nabil Elaraby, secretario general de la Liga Árabe. Abdelmoneim el Houni, futuro representante de los rebeldes en esta organización, afirmó después que el país reanudará su participación en la reunión de ministros de este sábado. La región perdió su reconocimiento como estado miembro en febrero, unos días después de que comenzaran las protestas contra el régimen y ante la violenta respuesta gubernamental para reprimirlas. Fue, precisamente, el mismo año en el que

Libia ocupaba la presidencia de turno en este seno. El CNT avanza también en el plano económico. Silvio Berlusconi, primer ministro italiano, anunció este jueves que su Gobierno ha decidido desbloquear una primera partida de 350 millones de euros de los bienes congelados al régimen de Gadafi. Lo hizo al término de un encuentro con Mahmud Jibril, su homólogo en el CNT.

El mandatario transalpino informó también de que la petrolera italiana ENI firmará un acuerdo con los rebeldes, «probablemente el próximo lunes». Según Il Cavaliere, la rúbrica tendrá lugar en Benghasi y, con ella, «se anticiparán, sin pago, cantidades de gas y petróleo para atender las primeras exigencias del pueblo libio».

Paolo Scaroni, administrador delegado de la compañía, aclaró después que Libia lo pagará en petróleo cuando sus pozos de extracción estén nuevamente en funcionamiento, algo que, según él, podría ocurrir en un plazo de entre 6 y 18 meses . Berlusconi mostró la «disponibilidad» de Italia a ayudar a las nuevas autoridades en la formación de las fuerzas de seguridad. También en materia de educación y sanidad. El dirigente aprovechó para desearle todo lo mejor a Jibril en este «duro trabajo de transformar Libia en una verdadera democracia».

El aludido advirtió de que su país necesita ahora «ayuda urgente». En su opinión, «el mayor elemento desestabilizador, sería la imposibilidad del CNT de ofrecer los servicios básicos y pagar los salarios de la gente, que lleva meses sin cobrar». El nuevo gobierno en construcción no podrá atender las cuestiones prioritarias «si no dispone de los fondos necesarios».