Españoles atrapados en Libia escapan en un avión portugués ante la lentitud de la diplomacia

El grupo de españoles partió a las 20.30 de la noche de Libia en un vuelo con dirección a Palermo (Sicilia, Italia), donde han pasado la noche, informan fuentes de la empresa Tolder , que contaba con cuatro trabajadores en la zona.

Hasta un centenar de personas lograron entrar en el Hércules enviado por Portugal para evacuar a sus ciudadanos, informa el empresario español Fernando Saavedra, quien agradece enormemente «la gentileza y generosidad» del país vecino a la hora de acoger a los trabajadores de su empresa y de Triarena, la compañía que se encargaba hasta ahora de acondicionar el estadio River de la capital libia .

Los trabajadores -entre los que también se encontraban polacos, rumanos y marroquíes con residencia en España- llegaron «derrotados físicamente después de 30 horas en el aeropuerto sin dormir ni comer, pero muy contentos», explica Saavedra. Una vez en Palermo, donde aterrizaron pasadas las 21.30, las autoridades italianas instalaron a los trabajadores en un hotel y esta mañana se esperaba su llegada a España en otro vuelo.

Saavedra insiste en que la situación que han vivido los españoles era extrema: «Se han jugado la vida. Fuera del aeropuerto había una batalla campal porque la gente quería entrar y se produjeron escenas de mucha tensión», explica.

Ayer, uno de los españoles atrapados, Juan Polo, declaraba a Punto Radio que su situación era «complicada. No tenemos más que una mano delante y otra detrás, billetes que no sirven y la Embajada que no hace nada. No vemos la salida ». Debido a esta situación, los españoles buscaron la ayuda de otros países de la Unión Europea.

Todos los afectados son muy críticios con la acción de la Embajada española en Libia y de la diplomacia española en general. «Les comunicaron que no tenía presupuesto para repatriar a españoles», explicaba ayer a EP la hermana de un joven vasco atrapado a 700 kilómetros de Trípoli.

El Gobierno decidió ayer, después de una reunión para abordar la crisis libia, enviar un avión para traer de vuelta a los españoles que todavía queden allí y deseen salir. «Ese vuelo llega tarde», denuncia Fernando Saavedra, «pero servirá para los que todavía intentan buscar una vía de escape y que no han conseguido llegar al aeropuerto».

Pese a estas críticas, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero , ha negado esta mañana que se haya tardado en reaccionar ante la crisis y aseguró que se han tomado las medidas necesarias «cuando era procedente». Zapatero hizo estas declaraciones ante las preguntas de los periodistas en los pasillos del Congreso, donde minutos antes había participado en la sesión de control al Ejecutivo.

El avión militar español ya se encuentra en suelo africano, según ha declarado la ministra de Exteriores, Trinidad Jiménez, aunque todavía no se ha podido acercar al aeropuerto de Trípoli. En él espera que vuelvan «entre 50 y 80 españoles».