Malaysia Airlines será rescatada por su Gobierno para salvarse de la quiebra

«La reestructuración propuesta requerirá que todas las partes trabajen juntas para acometer lo que será una completa reparación de la aerolínea nacional», anunció el fondo estatal Khazanah en un comunicado. A su juicio, «es la única opción para revivir nuestra aerolínea nacional con el fin de que sea rentable como entidad comercial y cumpla su función como un motor vital del desarrollo del país».

La reputación de Malaysia Airlines, que llevaba arrastrando varios años de pérdidas, quedó seriamente dañada cuando el vuelo MH 370 , que cubría el trayecto entre Kuala Lumpur y Pekín con 249 personas, desapareció el pasado 8 de marzo tras desviarse de su ruta por motivos aún desconocidos. En lo que supone uno de los mayores misterios de la aviación, los satélites espaciales siguieron su rumbo hasta que cayó en algún lugar del Océano Indico, pero aún no ha aparecido ni rastro del aparato. En julio, y rompiendo todas las leyes de la probabilidad, otro vuelo de Malaysia Airlines – el MH 17 que iba de Ámsterdam a Kuala Lumpur con 298 ocupantes – fue abatido mientras sobrevolaba la zona en guerra de Ucrania por un misil supuestamente disparado por los rebeldes pro-rusos.

Si la primera catástrofe, que provocó una caída del 60 por ciento de sus ventas en China, asestó un golpe mortal a la compañía, la segunda le ha dado la puntilla. En los últimos nueve meses, su valor se ha desplomado más de un 40 por ciento y sus pérdidas aumentaron un 59 por ciento en el primer trimestre de este año, cuando ascendieron a 443 millones de ringgit (103 millones de euros). Para evitar su cierre, el Gobierno intervendrá Malaysia Airlines a través del fondo estatal Khazanah, que en los últimos años ya le había inyectado unos 750 millones de euros.

Fundada en 1937, durante la época colonial británica, esta aerolínea estatal era hasta hace poco una de las más prestigiosas de Oriente y un seña de identidad de Malasia. Con 19.000 empleados y 122 aviones, entre ellos seis Airbus A380, cada día transporta a 37.000 pasajeros a 80 destinos de todo el planeta. Galardonada con más de un centenar de premios durante la última década, en 2012 fue nombrada la mejor aerolínea de cinco estrellas del mundo en la reconocida clasificación de la consultora británica Skytrax, donde cada año solía ocupar sus primeros puestos.

Pero Malaysia Airlines venía arrastrando también durante la última década una severa crisis que le llevó a perder 1.700 millones de ringgit (372 millones de euros) el año pasado. Tras su declive subyace, además de la subida del precio del petróleo, la cada vez mayor competencia de las aerolíneas de «bajo coste» orientales, que tienen como su máximo exponente a la también compañía malasia Air Asia. En 2011, cuando los 13 millones de pasajeros de Malaysia Airlines generaron unos ingresos de 13.600 millones de ringgit (2.981 millones de euros), los números rojos alcanzaron los 2.500 millones de ringgit (547 millones de euros), una cifra récord que obligó a su consejo de administración a poner en marcha un drástico plan de recortes.