Tormenta política en la cúspide familiar del Frente Nacional

Jean-Marie Le Pen decidió «responder» personalmente al cantante y actor Patrick Brusel, de familia judío, muy crítico con las tesis políticas de la extrema derecha, declarando: «Con él y otros artistas haremos una hornada, la próxima vez» . Dicha con una risa brutal, la frase fue interpretada automáticamente como una alusión palmaria a los hornos crematorios donde los nazis exterminaron a millones de judíos.

No es la primera vez que Le Pen hace «chistes» con esa abominable tragedia histórica. En 1987, el mismo Le Pen declaró que los hornos de exterminio nazis «solo fueron un detalle de la historia». Un año más tarde, volvió a insistir en ese detalle jugando con el apellido de una personalidad política, haciendo un «chiste» atroz sobre un personaje al que califió de «Durafour, crematoire». En francés, ese juego de palabras asocia el «four» (horno) con crematorio.

La justicia ha condenado a Le Pen en numerosas ocasiones. Pero los triunfos de su partido en las recientes elecciones municipales y europeas han vuelto a dar alas a su afición a los «chistes» más crudoz y atroces, de carácter racista y antisemita.

Louis Alliot, el compañero sentimental de Marine Le Pen, fue el primero en reaccionar, diciendo que la «salida» del padre de su compañera era una «estupidez». Marine Le Pen se vio forzada a reaccionar, limitándose a comentar que su padre había cometido una «error político».

Tras la provocación, sugiriendo una «próxima hornada de artistas hostiles a nuestro partido», Jean-Marie Le Pen respondió a su propia hija, con violencia apenas contenida: «No voy a someterme al dictado de los hijos o hijas de mi partido. El “marinismo” es una corriente política extraña y sin consistencia».

El «marinismo» es la corriente política que Marine Le Pen desea imponer en el partido fundado por su padre, partidario de una línea política «más vigorosa».

Jean-Marine y Marine Le Pen viven en la misma residencia familiar de gran lujo, heredada por el padre en circunstancias poco claras. Marine y sus hermanas ocupan distintas dependencias. El padre y la hija se cruzan varias veces al día, forzosamente, por los pasillos y el parque de esa residencia.

Los cuadros del FN, por su parte, asisten consternados a las tensiones entre el padre y la hija. Floriant Philippo, vice presidente del FN comenta: «Jean-Marie y Marine deben explicarse. Le Pen padre debía comprender que sus palabras eran de una brutalidad inapropiada».