Enfrentamiento total entre Grillo, Berlusconi y Renzi

Berlusconi, líder de Forza Italia, que ya había calificado a Grillo como un dictador sanguinario tipo Hitler, Stalin o un nuevo Pol Pot, ha vuelto hoy a la carga: «Grillo es un asesino. Es un experto en no entrar en prisión, porque es culpable de haber matado a tres amigos suyos al entrar en una carretera a pesar de que había un cartel que lo impedía. El pudo escapar del coche, pero no sus amigos. Fue condenado por homicidio múltiple a 14 meses de cárcel. Ver ahora a este señor que hace el moralista me disturba. Además, no hacía los espectáculos como cómico si no tenía la seguridad de que le pagaban en negro para evadir impuestos. Era famoso por esto». A este ataque de Berlusconi , de inmediato Grillo ha replicado: «¿Uno de los más grandes evasores de la historia me llama a mi evasor? Es fantástico... Berlusconi es un pobre hombre que no cree ni siquiera en lo que dice. Intenta salvar sus empresas, no los electores».

Grillo no se queda atrás en los graves insultos y amenazas, utilizando un lenguaje absolutamente bárbaro. Para subrayar que Matteo Renzi desaparecerá de la vida política y perderá las elecciones, el cómico utilizó una expresión de la mafia, «lupara bianca», término con el que se describe el modo en que la mafia elimina y hace desaparecer los cadáveres de sus víctimas. «El sistema escoge a sus representantes para un proyecto, si lo hacen, bien…, en caso contrario son eliminados». Como hace la mafia con la lupara bianca. Renzi ha sido escogido para un proyecto, para ganar las elecciones, pero las perderá», ha señalado el cómico.

En realidad, Grillo adopta la táctica de Berlusconi, su maestro de populismo, y dice a cada interlocutor lo que quiere escuchar. Lo volvió a demostrar anoche, al acudir a un conocido programa de la RAI, «Porta a Porta», con un público moderado. Para captar esos electores, tradicionalmente favorables a Forza Italia de Berlusconi, el cómico Grillo bajó su tono violento: «Quiero hacer ver que no soy ni Hitler ni Stalin». En cuanto a contenidos, Grillo solo tiene un mensaje: «Todos los políticos actuales, a casa». El problema está en que el líder del Movimiento 5 Estrellas es incapaz de aclarar con propuestas qué haría él para salvar Italia.

El primer ministro, Matteo Renzi, intenta alejarse del lenguaje de insultos: «Ellos se pelean, yo gobierno», ha manifestado Renzi, quien reitera que él representa la Italia de la esperanza frente a la rabia que alimenta Grillo.

Ante el clima de confrontación que vive el país, el presidente de la República, Giorgio Napolitano, ha mostrado así su preocupación: «“El enfrentamiento político es áspero, pero hay que mantener la unidad. Hay que rechazar los populismos y estériles nacionalismos».

La incertidumbre sobre el resultado electoral es grande. Podría jugar un papel decisivo la abstención y el sur del país, donde Grillo confía en el voto de los jóvenes desesperados por no encontrar trabajo. El Partido Democrático de Renzi considera que solo podría cantar victoria si supera en un 5 % al Movimiento de Grillo, cosa que está por ver. El tercer contendiente, Silvio Berlusconi, quedará lejos. Teme incluso no llegar al 20 %, lo que sería catastrófico para Forza Italia. En ese caso, diversas fuentes indican que su hija Marina, presidenta de Mondadori, podría convertirse en la lideresa del partido.