El futuro de Assad estanca la negociación sobre Siria

La entrada en juego de los temas políticos ha elevado la tensión en la cumbre de Ginebra . Lajdar Brahimi, ha tenido que suspender la reunión de la mañana entre Gobierno de Siria y oposición cuando apenas había discurrido una hora debido a las fuertes discrepancias entre las dos partes. Por la tarde están previstos nuevos encuentros, pero esta vez con cada delegación por separado.

Los enviados de Bashar Al Assad han presentado una «declaración de principios» que incluiría su visión de «los principios esenciales para salvar a Siria, el Estado y su pueblo, del terrorismo extremista», según han confirmado fuentes de la oposición al final del encuentro. Un documento que el otro lado no acepta porque «es claramente una desviación del objetivo. Nosotros queríamos discutir de asuntos que el régimen no quería. Ellos sólo querían hablar de terrorismo», ha lamentado Murhal Jouejati, delegado de la Coalición Nacional Siria (CNFROS). Para los opositores es momento de acordar una hoja de ruta para la formación de un Gobierno de transición que sustituya a Assad, una línea roja para el régimen.

Con el diálogo estancado en la sede de Naciones Unidas, Ginebra mira también a Homs para comprobar si se cumple el primer acuerdo alcanzado para la salida de mujeres y niños y la llegada de ayuda humanitaria a su parte vieja. El portavoz opositor, Monzer Akbik, ha señalado que hasta el momento «no hay progreso ni en el acceso de ayuda a Homs ni en la cuestión de la liberación de prisioneros», otro de los puntos que ayer se pusieron sobre la mesa.

La televisión siria asegura que este lunes está prevista una reunión entre un enviado de la ONU y el gobernador de Homs, Talal Barrazi, para abordar el tema humanitario en el barrio cercado por el Ejército. El medio oficial recoge las palabras de Barrazi quien asegura que el único obstáculo para cumplir el acuerdo «son los disparos de los francotiradores de los grupos terroristas».