Amargo afronta este oscuro capítulo «con mucha fuerza y con la misma tranquilidad que el primer día porque si nada había, nada puede pasar». Así lo ha expresado a 'Europa Press' tras un tiempo desaparecido del foco mediático. Además, ha compartido los problemas económicos que ha padecido como consecuencia de su imputación: «Gracias a Dios, tengo unos padres que quiero mucho y que me quieren mucho. Y algunas propiedades que tenía y que tuve que vender. Menos mal, si no me veo pidiéndote».
A la espera que de llegue el juicio, el bailaor de flamenco se encuentra «bien, contento y tranquilo». También ha explicado que no se encuentra en Madrid y que ha puesto rumbo al Levante para pasar una temporada: «Estoy viviendo en Alicante, frente al mar. Estoy con un proyecto en la universidad de salud mental», ha confesado.
El pasado mes de junio, también expresó que desde que estalló la polémica su vida ha cambiado por completo: «Muchas personas han tenido prejuicios y estigma hacía mí y han demostrado que no eran tan amigos». Pero no solo en el ámbito personal, también en el profesional donde perdió «un par de campañas de publicidad y una serie de televisión». Cuando se demuestre mi inocencia, ¿quién me devuelve todo este tiempo?», añadió.
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete