Han pasado dieciocho años de la muerte de Sandra Domecq, el que fue el gran amor de Bertín Osborne. A pesar de que el matrimonio se terminó porque ambos eran demasiado jóvenes, la relación entre ellos nunca se rompió. Disfrutaron de una vida ... que se fue demasiado pronto.
Bertín y Sandra vivieron momentos imposibles de olvidar. No todos fueron felices. Les marcó sobremanera la muerte de su primer hijo, Cristian, que falleció pocos días después de haber nacido. Aunque el cantante ha hablado poco sobre un suceso que le marcó para siempre, abordó este hecho durante una entrevista que concedió a Toñi Moreno: «Nació con un problema del hígado y a los 15 o 20 días murió en mis brazos en La Paz, en Madrid».
Un episodio que la pareja sobrellevó como pudo y del que pudieron reponerse gracias a la ayuda, el apoyo y el cariño de sus familiares y amigos: «Éramos muy jóvenes. Aquello fue un palo tremendo. Lo llevamos muy mal los dos. Sandra estaba desconsolada y yo también, evidentemente. Fue un impacto y una impresión tremendos. Pero bueno, al año se quedó embarazada de Alejandra. Aquello fue 'heavy', pero lo pasamos enseguida».
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