Suscribete a
ABC Premium

Josemi Rodríguez-Sieiro

La cursilería

No hay que confundirlos con los prepotentes

Gtres

Josemi Rodríguez-Sieiro

Desde muy pequeño comprendí lo que era la cursilería. Una tía abuela mía, a la que no conocía, me dijo cuando me vió: «qué niño tan lindo y qué mirada tan interesante tiene». Comprendí que además de falsa y mentirosa, porque yo era bizco, era ... una cursi redomada por llamarme lindo. Para mí, desde aquel momento supe el significado práctico de cursilería.

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comparte esta noticia por correo electrónico
Reporta un error en esta noticia