Susana, madre ya confinada por coronavirus: «Es la tercera vez que mis hijos sufren un encierro de estas características»

Ahora, continua esta madre, «al malestar provocado por el virus y la complejidad del aislamiento dentro de la unidad familiar, tengo que sumarle un sentimiento de culpabilidad enorme. Sé que es muy difícil controlar todo pero no dejo de pensar en que mis hijos están pagando las consecuencias de mi enfermedad». «Racionalmente sé que no es justo sentirse así pero emocionalmente es muy difícil pararlo. Además del miedo que me produce pensar que los niños se pueden contagiar, creo que es bastante triste saber que no les podemos garantizar un curso escolar normal o al menos presencial al 100 por cien», advierte esta mujer, a quien también le pesa el solo hecho de saber que hay contactos suyos aisladas por su caso.

«Una amiga me decía con humor que iba a ser la madre señalada de la clase, y la verdad es que pensé en lo injusto que es sentirse así. Por supuesto nadie en el colegio de mis hijos, un concertado de Moncloa-Aravaca me ha hecho sentir mal, todo lo contrario. Hemos recibido un apoyo fantástico por parte del centro y de los profesores, así como de muchas familias. Aun así ese sentimiento de autoculpabilidad, injustificado y absolutamente irracional, está ahí. Creo que las familias tenemos que apoyarnos en estos momentos y normalizar la situación, porque presiento que nos va a pasar muchas veces. Y no habrá culpables, solo afectados».